Un hombre de 37 años de edad y nacionalidad española ha sido detenido tras una persecución de película por diversas calles del distrito madrileño de Puente de Vallecas, que acabó con el fugado detenido y un agente de la Policía Nacional herido.
Los hechos ocurrieron en la noche del pasado 5 de agosto cuando una patrulla observó como el conductor de un turismo Seat Ibiza de color oscuro se saltaba un semáforo en fase roja en la calle Arroyo del Olivar. Tras seguirle y darle el alto en el siguiente semáforo, el conductor aceleró y huyó a gran velocidad.
Es entonces cuando dio comienzo una persecución a gran velocidad atravesando diversas calles de Puente de Vallecas como la calle de Arroyo del Olivar, la avenida de Buenos Aires, la avenida de Río Iguazú, la avenida de Pedro Laborde y la avenida de Pablo Neruda. El vehículo circuló en sentido contrario y llegó a realizar un cambio de dirección atravesando una mediana, para después internarse en un entramado de calles estrechas donde los agentes le perdieron momentáneamente de vista.
Finalmente, el coche fue localizado estacionado en un vado de la calle San Claudio, junto a un parque, con la puerta del conductor abierta y el conductor en su interior, relajado viéndose seguro ya. Al ver a los policías salió corriendo, dándole alcance uno de los funcionarios y, tras un forcejeo en el que el detenido opuso resistencia, fue reducido y esposado. Un agente resultó herido en una mano durante la detención.
El arrestado fue trasladado a un centro de salud para recibir asistencia y a continuación fue puesto a disposición judicial bajo la acusación de los delitos de robo de vehículo, conducción temeraria, atentado y desobediencia a la autoridad.
El coche, que figuraba como robado en Gijón (Asturias), acabó con bastantes daños, incluida la fractura de la luna del conductor y del volante, posiblemente fruto del robo. En su interior se encontraron dos volantes marca Mercedes cuya procedencia el fugado no supo o quiso explicar.

