Patrimonio Nacional abre hoy de nuevo al público la Antesacristía y la Sacristía del Palacio Real de Madrid, que habían permanecido fuera del recorrido turístico durante más de cuarenta años. Desde esta mañana, ambos espacios están incluidos en la visita del Palacio, tanto en la guiada como en la libre, y cuentan con apoyo museográfico. La reapertura de la Antesacristía y la Sacristía va a permitir al visitante explorar de una manera más contextualizada la Real Capilla y descubrir los espacios en los que se preparaban los oficios y se custodiaban los objetos litúrgicos.
La Antesacristía alberga una fuente del siglo XVIII, un espejo isabelino y asientos de estilo neogótico. En las vitrinas se exponen varios elementos de la Real Capilla, como una dalmática -tipo de vestimenta litúrgica-, un juego de candeleros y cruz de altar o un juego de bautizar de principios del siglo XIX. También se exhiben pinturas de temática religiosa realizadas por distintas escuelas.
En el espacio de la Sacristía se exponen varias esculturas del siglo XVIII, como La Inmaculada Concepción, de Manuel Álvarez, el Griego, o el delicado grupo de La caída de Cristo, esculpido en marfil por Celedonio Nicolás de Arce. En pintura sobresalen Cristo y la samaritana, de Orazio Gentileschi; San José con el Niño, de Antonio de Pereda; Cristo muerto llorado por dos ángeles, de Charles Le Brun, y Cristo servido por los ángeles, de Pablo de Céspedes.
Con la incorporación de la Antesacristía y la Sacristía al recorrido turístico, Patrimonio Nacional continúa con su política de abrir nuevos espacios a los visitantes, como ha hecho durante los últimos meses en el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial o el Palacio Real de La Granja de San Ildefonso. El Palacio Real de Madrid es uno de los mejor conservados en toda Europa y, con su millón y medio de visitantes anual, es el monumento más visitado de Patrimonio Nacional.