La Comunidad de Madrid invertirá 180,9 millones de euros en las obras de ampliación de la Línea 5 de Metro que enlazará Alameda de Osuna con el Aeropuerto internacional Adolfo Suárez Madrid-Barajas. El Consejo de Gobierno ha conocido hoy la adjudicación de las obras que comenzarán en primavera y se extenderán durante 30 meses.
La Consejería de Vivienda, Transportes e Infraestructuras ha proyectado esta prolongación, de 1,7 kilómetros, hasta la parada de la Línea 8 correspondiente a las terminales T1-T2-T3 del aeródromo madrileño, donde se establecerá una estación de intercambio con cuatro andenes, dos vestíbulos y una superficie en planta de 5.000 metros cuadrados. La infraestructura contará, además, con la instalación de ascensores y escaleras mecánicas que la harán aún más accesible.
Este proyecto mejorará la conectividad con el centro de la capital y abrirá una nueva entrada al aeropuerto a través de la cuarta línea más utilizada de la red, la 5, que transporta más de 77 millones de viajeros al año. A lo largo de 25 kilómetros, atraviesa 32 estaciones, incluidas algunas en pleno centro, como Gran Vía o Callao y enlaza con diez líneas, además del Ramal Ópera-Príncipe Pío.
Estos trabajos financiados con fondos europeos beneficiarán a los más de 66 millones de personas que han utilizado este año el aeropuerto civil más importante de España y tercero de la Unión Europea y, muy especialmente, a las más de 40.000 que trabajan y residen en las inmediaciones de la L5.
Mejorar el confort y la seguridad de Metro
Por otro lado, el Consejo de Gobierno también ha conocido la propuesta de adjudicación de un contrato de 4,9 millones de euros para garantizar el confort y la seguridad en la circulación de los trenes de Metro.
En concreto, las actuaciones están destinadas a tres modelos (series 6000, 8000 y 3000) que se emplean en buena parte de las líneas del suburbano (2, 3, 4, 5, 6, 8, 9A, 9B, 10B, 11, 12 y Ramal) y tienen como objetivo la revisión y reparación de las balonas de suspensión secundaria de los convoyes, un elemento fundamental para reducir las vibraciones percibidas por los viajeros.