Esta mañana de lunes, 11 de diciembre, la vecindad de Arganzuela se ha levantado con la imagen más temida: maquinaria y operarios han empezado la tala de los árboles en el parque de Arganzuela, en Madrid Río. Ante la inminente desaparición de más de 160 ejemplares del parque y con una fuerte presencia policial, decenas de vecinos han comenzado espontáneamente a manifestarse en el Paseo de Yeserías a la altura del número 51, por donde entran y salen los camiones y la maquinaria pesada, con el fin de mostrar su «profundo rechazo».
— Ecologistas Madrid (@EeAmadrid) December 11, 2023
El movimiento vecinal lleva 10 meses de movilizaciones para protestar contra las «talas masivas» de árboles y la «destrucción desproporcionada» de zonas verdes por las obras de ampliación de la línea 11 de Metro. Denuncian que la Comunidad de Madrid» ha decidido una vez más ir a hechos consumados sin atender a razones». Critican que el Gobierno regional de Isabel Díaz Ayuso (PP) «no se avenga a estudiar las alternativas viables que permitirían construir el Metro y reducir el daño medioambiental y social, tal y como reclaman los vecinos y vecinas».
Gran presencia policial en protesta vecinal en Arganzuela. Impiden grabar al interior donde esta un grupo de activistas atado a los árboles #NoAlaTala pic.twitter.com/RahDA2ILVh
— Rosa M. Tristán (@RosaTristan) December 11, 2023
Además, el movimiento vecinal reprocha a la Comunidad de Madrid la utilización del artículo 163.5 de la Ley del Suelo para «poder vulnerar las Normas Urbanísticas de Madrid, bajo una supuesta urgencia» y un «interés general que no se puede aplicar existiendo alternativas». Asimismo, acusa al Ayuntamiento de «ser cómplice de la tala masiva, puesto que ha firmado las autorizaciones de tala sin esperar a que esté terminado el estudio hidrogeológico, que garantice la seguridad de las viviendas, ni a tener el proyecto detallado de la reconstrucción del parque», tal y como obliga el Informe de Impacto Ambiental aprobado el 14 de noviembre.
Los colectivos vecinales y conservacionistas recuerdan que existe un recurso contencioso-administrativo en marcha registrado por Ecologistas en Acción amparado en el incumplimiento de la Ley de Evaluación Ambiental y el obligado procedimiento de información pública. Dicho procedimiento judicial aún no se ha resuelto, y «sin embargo la Comunidad de Madrid ha optado continuar con las obras sin esperar a conocer la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid».
Denuncian que la Comunidad de Madrid también «haga oídos sordos al Parlamento Europeo y no esperen al resultado de la investigación en curso de esta institución tras una petición aprobada en la Comisión de Peticiones el pasado 21 de septiembre y la carta enviada por dicha comisión el pasado 4 de noviembre». Tampoco esperan el resultado del procedimiento en curso del Mecanismo de Reclamaciones del Banco Europeo de Inversiones (BEI).
A la protesta vecinal por la tala, que se ha producido coincidiendo con la celebración de la COP28 (la cumbre del clima que tiene lugar en Dubái hasta el 12 de diciembre), se ha sumado Rebelión o Extinción, movimiento que denuncia la inacción de los gobiernos para tomar medidas contra la emergencia climática y que ve la desaparición de árboles en el contexto urbano como una consecuencia más de la misma. «Ante la negligencia de líderes y gobernantes», los activistas han unido su protesta a la del movimiento vecinal para mostrar «la importancia de seguir presionando desde las calles por un cambio real y por toda la vida en el planeta».
Los colectivos vecinales y ecologistas condenan el «negacionismo climático de la Comunidad de Madrid, que, sin esperar siquiera el fin de la COP28, da la espalda a las voces de los científicos que nos alternan de la situación de emergencia climática y calentamiento global que afecta gravemente ciudades del Sur de Europa como Madrid». Y recuerdan que «renaturalizar las ciudades pasa obligatoriamente por preservar las zonas verdes, los suelos naturales y el arbolado maduro que ya existe».