El delegado de Políticas de Vivienda, Álvaro González, acompañado de representantes de todos grupos políticos municipales excepto Vox, cuyos concejales ni han aparecido, y del delegado del Gobierno de España en Madrid, Francisco Martín, ha presidido este mediodía en el Palacio de Cibeles el minuto de silencio convocado por el Ayuntamiento como muestra de repulsa y condena por el asesinato, por violencia de género, de una vecina del distrito de Moratalaz.
González ha condenado “rotundamente” este asesinato y ha señalado la importancia de que “las mujeres que se sientan amenazadas o cohibidas” denuncien estos hechos porque “esta es una lacra que nos atañe a todos y contra la que todos tenemos que luchar”.
El Ayuntamiento ha declarado tres días de luto oficial en la ciudad de Madrid desde hoy, 22 de agosto, hasta el día 25, durante los cuales la bandera de la ciudad ondeará a media asta en todos los edificios municipales.
Asesinato en Moratalaz
El cuerpo sin vida de Soledad, la mujer de 50 años y nacionalidad española asesinada por su marido en el domicilio familiar de Moratalaz, y el de este de 62 años y también español, y que fueron encontrados el pasado jueves, 17 de agosto, llevaban entre 2 y 3 días fallecidos, tal y como han determinado las autopsias realizadas.
La autopsia ha señalado también que la pistola de bala cautiva encontrada junto al cadáver del hombre fue tanto el arma con la que él que mató a su mujer como la utilizada en su suicidio. Se trata de una pistola, también llamada de perno cautivo penetrante o clavija perforadora, empleada para aturdir o sacrificar animales de forma rápida con un perno o clavo que, en la cabeza, daña el cerebro.
Las informaciones aportadas por el Ministerio de Igualdad señalan que se trata de un asesinato por violencia de género, para después su marido haberse quitado la vida. Ambos tenían un hijo y una hija mayores de edad y no existían denuncias previas por maltrato ni ninguna orden de alejamiento en vigor.
Los hechos ocurrieron en la tarde de este jueves, 17 de agosto, cuando los agentes fueron alertados a través de los vecinos por un fuerte olor que trascendía del hogar, ubicado en el número 81 de la calle Félix Rodríguez de la Fuente. También la perra de la pareja llevaba mucho tiempo ladrando sin que aparentemente nadie la atendiera.
Al forzar la puerta los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, sobre las 2 de la tarde, los funcionarios de la Policía Municipal encontraron los cuerpos sin vida de ambas personas en diferentes estancias de la casa. Sanitarios del SAMUR-Protección Civil certificaron su muerte sin manipular los cuerpos.
Hasta el lugar se desplazaron Policía Científica y el Grupo V de homicidios. El juez de guardia aprobó horas más tarde el levantamiento de los cadáveres y el precinto de la vivienda, por orden del Juzgado de Instrucción nº 5 de Madrid.