Los robos y el hurto de productos suponen una conducta delictiva a la que se enfrentan a diario desde pequeños comercios hasta grandes supermercados. Los artículos más robados varían en función de la época del año y de la ubicación. El calor, las vacaciones y el ocio nocturno son algunos de los principales iconos de España cuando llega el verano.
Miles de personas se trasladan a las innumerables playas de la costa para desconectar unos días, lo que hace que muchos municipios multipliquen su población entre junio y septiembre. En algunos puntos turísticos costeros existen compañías con tiendas que reabren sus puertas para comenzar la temporada estival para atender el crecimiento de la demanda.
Sin embargo, este incremento del tránsito también conlleva un mayor volumen de clientes para muchos negocios que, en ocasiones, llegan a saturarse, facilitando que se perpetren hurtos en ellos. Según el estudio de Market Analytics Department de Checkpoint Systems, el TOP 5 de productos más hurtados en verano es 1. Bronceadores;
2. Preservativos; 3. Bebidas alcoholicas; 4. Cremas solares; 5. Helados. Poniendo la lupa en el caso específico de Madrid, destaca el hurto de helados, maquillaje y preservativos.
El estudio de Checkpoint Systems, firma de referencia en soluciones antihurto y RFID para el comercio minorista, está basado en datos exclusivos obtenidos tras realizar una encuesta entre más del 90% de la totalidad de supermercados del panorama español; que suman un total de más de 17.000 tiendas. Como detalla la encuesta, el importe del hurto en verano representa un 0,9% sobre las ventas registradas durante el periodo estival por los retailers encuestados, lo que representa una pérdida aproximada de 170 millones de euros tan solo en verano, la estación con un índice más elevado de hurtos. Un problema grave para muchos negocios que, según los datos, está al alza en los últimos años.
Según datos del Ministerio de Interior, los hurtos veraniegos en España suponen un 26,7% del total anual y, en 2022, superaron la cifra de los 170.000 casos (en el periodo que comprende el tercer trimestre). Además, la comparativa con los últimos años alerta que, durante el verano de 2022, los hurtos crecieron un 24,7% respecto al año anterior; lo que supone una tendencia al alza que los expertos estiman que se puede repetir este verano.
Sin embargo, tal y como se deduce de la encuesta de Checkpoint Systems, los productos más hurtados en verano varían mucho en función de la comunidad autónoma. Este es el mapa del hurto diferenciando por regiones:
Entre los productos más hurtados en supermercados por regiones de España, destacan la presencia de utensilios destinados a combatir los principales agentes con los que convivimos en verano: el calor y los mosquitos. El estudio de Checkpoint Systems revela que en Madrid los helados y la cosmética encabezan el listado del hurto. En Andalucía los antimosquitos y los bronceadores.
En la Comunidad Valenciana los bronceadores y, en menor medida, los artículos de jardinería. En Galicia destacan las conservas y los quesos. En las Islas Baleares resalta el hurto de maquillajes y cárnicos frescos. En el País Vasco los productos frescos y los aceites son los más vulnerables. Por su parte, mientras en otras regiones costeras de la península como Asturias, Cantabria y Murcia hurtan merluza congelada, cremas solares y chanclas, respectivamente; en Aragón sobresalen las cápsulas de café y la cosmética.
Cabe destacar que Cataluña ha sido, durante el verano de 2022, la CCAA con mayor volumen de hurtos, representando más del 20% del total nacional. Los vinos y licores destacan como los productos más hurtados en la región catalana, seguidos por los embutidos y los helados. Además, llama la atención que en Canarias sean los preservativos los artículos más hurtados, justo por encima de los bronceadores y las chanclas.
Otro punto característico extraído de la encuesta con los retailers es el cambio de perfil de los ladrones. Según indican gran parte de los encuestados, mientras que anteriormente los delincuentes actuaban para consumir ellos mismos los productos robados, en la actualidad la tendencia indica que estos operan para luego vender los artículos sustraídos y obtener beneficios económicos.
