Activistas de Amnistía Internacional han instalado esta mañana de miércoles, 26 de octubre, un Monopoly gigante delante del Congreso de los Diputados para visibilizar que «la vivienda es un derecho con el que no se juega» y exigir con ello que se desbloquee la Ley de Vivienda.
Mediante el uso de este popular juego de simulación inmobiliaria, han señalado que la vivienda es ·un derecho humano necesario para desarrollar nuestro proyecto de vida. No debería ser un producto de lujo ni un bien de inversión. Actualmente, en el Congreso de los Diputados, se está tramitando un proyecto de ley que podría aprobarse en cuestión de semanas. «Es necesario y urgente que este texto garantice la protección necesaria de nuestro derecho a la vivienda», inciden.
«Si comprar una casa es solo un sueño para muchas personas, la opción del alquiler no lo pone más fácil», añaden. Los precios de los alquileres se han desbocado, solo en los últimos cinco años el precio medio del alquiler ha subido un 41% y desde el año 2013 se han producido más de 500 000 desalojos. Solo el 15,6% de personas jóvenes se emancipa y la única alternativa viable para una de cada tres jóvenes es el alquiler compartido.
En este contexto, un 37% de la población debe dedicar más del 40% de sus ingresos a los gastos de vivienda, diez puntos por encima de lo que recomienda el Banco de España (30%). Por su parte, el Parlamento Europeo señaló que una vivienda es asequible si el presupuesto restante de quien la habita es, cuando menos, suficiente para atender otros gastos fundamentales para una vida digna. «La crisis de vivienda en España, que hunde sus raíces en la crisis financiera de 2008, se agrava en el contexto actual de incremento del coste de la vida y sombrías perspectivas económicas», han concluido.