El chico de 19 años de edad y la chica de 23, ambos pareja de nacionalidad española aunque ella de origen colombiano, que habían resultado heridos graves esta madrugada de martes, 6 de septiembre, tras la explosión registrada en un bar del distrito madrileño de Carabanchel, han sido finalmente detenidos como presuntos autores del incendio y posterior deflagración.
Al parecer, ambos heridos habrían ocasionado el incendio que posteriormente ha desencadenado la explosión. Testigos dicen haber visto dos encapuchados salir del establecimiento momentos después, cuya descripción coincide con la de los detenidos, e incluso les vieron forzando la cerradura. Es más, la dueña del local ha denunciado que había sido objeto de amenazas.
Los hechos han ocurrido pasada la 1 de la madrugada en un local de la calle Cuevas de Altamira, al parecer por una fuga de gas. Cuando ha ocurrido la deflagración el bar estaba cerrado y sin nadie en su interior, pero las dos personas jóvenes que estaban en el exterior junto al establecimiento han sido alcanzados. Todo apunta a que ellos fueron los causantes del siniestro empleando algún artefacto incendiario.
En un primer momento sanitarios del SAMUR-Protección Civil han atendido a una chica de 23 años con quemaduras en el 90% del cuerpo, que tras ser estabilizada e intubada ha sido trasladada al Hospital de La Paz, donde ha ingresado en estado grave. Previamente había sido asistida por los vecinos. La mujer tiene antecedentes por riña tumultuaria y amenazas.
Apenas dos horas más tarde han atendido a un chico de 19 años en una calle colindante, con quemaduras en parte de su cuerpo por la misma explosión. Al parecer, el joven llegó a su casa y, tras ver su estado, sus familiares llamaron a Emergencias. Ha sido trasladado con pronóstico grave al Hospital de Getafe. El chico tiene antecedentes de cuando era menor de edad.
Los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid han procedido a controlar el escape de gas incendiado hasta el corte del suministro por parte de la compañía y han saneado las partes inestables en el bar, que ha quedado totalmente calcinado. Los negocios adyacentes no se han victo afectados.
Por su lado, la Policía Municipal ha acordonado la zona para facilitar el acceso de los servicios de emergencias mientras que agentes de la Policía Nacional desplazados al lugar del siniestro han abierto una investigación para esclarecer las circunstancias del suceso.