El pasado mes de octubre, y tras el juicio celebrado en septiembre, la Sección 15ª de la Audiencia Provincial de Madrid, de acuerdo con el veredicto del Jurado Popular, condenó a Kevin C. B. a 8 años de prisión y 9 años de pérdida de vigencia de permiso para conducir tras acabar con la vida de un joven de 20 años al chocar con su vehículo cuando circulaba en dirección contraria, de manera temeraria y triplicando la tasa de alcohol permitida.
Los hechos ocurrieron la mañana del 15 de septiembre de 2018 en la M-50 cuando el joven fallecido, Víctor López, se dirigía desde su casa en Rivas al tercer día en su nuevo trabajo en un hipermercado de San Fernando de Henares.
Con todo ello fue condenado como autor de un delito de conducción con manifiesto desprecio por la vida de los demás y de un delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas en concurso con un delito de homicidio doloso, con la atenuante de reparación del daño. Además, debe indemnizar con 100.000 euros al padre, con 110.000 euros a la madre y con otros 100.000 euros a la pareja del joven fallecido.
La tragedia caída sobre la familia de Víctor, que pidió incluso con recogida de firmas el endurecimiento de las penas por los delitos de tráfico y que estas se cumplieran en su integridad, no acabó aquí. Su padre, Francisco López, se suicidó un mes después tras conocer el fallo de la sentencia.
Ahora, la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) revisará dicha pena de 8 años de prisión y 9 años de pérdida de vigencia de permiso para conducir, además de las correspondientes indemnizaciones, tras el recurso interpuesto por el condenado contra la sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid, que se deliberará este martes en una vista pública.