El Ayuntamiento de Madrid, a través del Área de Cultura, Turismo y Deporte, iniciará en las próximas semanas las obras de rehabilitación del Palacio del Capricho, ubicado en el parque homónimo perteneciente al distrito de Barajas. La Junta de Gobierno ha aprobado el contrato para llevar a cabo el proyecto de rehabilitación final de este espacio histórico tras las deficiencias y problemas derivados del proyecto anterior.
Según ha explicado la portavoz municipal, Inmaculada Sanz, el objeto del proyecto actual es el de finalizar la rehabilitación estructural y de la envolvente (cubiertas y fachadas) del Palacio del Capricho con un criterio de intervención que pretende devolver al edificio sus valores patrimoniales perdidos, permitiendo que exista una continuidad para la rehabilitación interior de las salas como museo. El edificio será un museo dependiente del Área de Cultura, Turismo y Deporte, que girará en torno a la figura de la creadora del jardín del Capricho, la duquesa de Osuna, el propio jardín y su tiempo. Para ello, es necesario dotar al edificio de todos aquellos aspectos que un equipamiento cultural moderno necesita, teniendo al mismo tiempo muy presente la elevada protección del edificio como parte que es del Patrimonio Histórico de Madrid.
El estado actual. sobre el que se ha proyectado la reforma, es un edificio con una obra parcialmente ejecutada e interrumpida hace casi dos años, lo que ha supuesto la reconsideración de algunos sistemas constructivos y la imprescindible actualización de las instalaciones ya implementadas que han sufrido un lógico deterioro. Se trata de trabajos complejos que requieren no solo de un nuevo proyecto, sino de la revisión de todo lo existente para, con criterios de economía y de funcionalidad, rehabilitar el edificio para que el nuevo museo pueda implementarse una vez finalizadas las obras.
Un proyecto dividido en dos fases
Con este planteamiento, se ha considerado técnicamente más conveniente la realización de la obra en dos fases. La primera asume fundamentalmente la parte constructiva, estructural y de cerramiento del edificio, de manera que garantice un contenedor estanco y seguro, así como todas las intervenciones necesarias en el exterior del edificio, incluyendo el Centro de Transformación.
La segunda fase asumirá los acabados interiores del inmueble y su adaptación como museo. Se ha calculado que el decalaje entre ambas fases podría ser de unos seis meses, de manera que mientras se encuentre en ejecución la primera fase, se podrán incorporar datos que faciliten la realización del proyecto de la segunda.
Estas obras conllevan una inversión municipal de 2,3 millones de euros para la fase 1, gasto ya aprobado por la Junta de Gobierno y el plazo de ejecución para esta primera parte es de 12 meses. El proyecto y la dirección de los trabajos se realiza por los arquitectos de la Dirección General de Patrimonio Cultural.