Agentes de la Policía Nacional han evitado que un matrimonio fuera asesinado a puñaladas por su propio hijo en el domicilio de la familia en el distrito madrileño de Chamartín. Los hechos ocurrieron sobre las 6 de la madrugada del pasado viernes, 18 de febrero, en una vivienda muy próxima a la estación de Chamartín.
Al parecer, el hijo de 28 años de edad se despertó y, en un posible brote psicótico, fue a la habitación de sus padres, de unos 60 años de edad, y comenzó a asfixiar a su padre. Sin embargo, su madre se despertó y evitó que siguiera. En ese momento, el chico cogió un cuchillo de 30 centímetros de hoja e intentó degollar a su padre y acuchillar a su madre.
Heridos, consiguieron huir y refugiarse en otra habitación de la casa, colocando diversos muebles en la puerta para evitar que su hijo entrase. Ante los gritos del matrimonio, los vecinos avisaron a la Policía Nacional, cuyos agentes acudieron al lugar, derribaron la puerta de entrada con un ariete ante las peticiones desesperadas de la madre: «si no entráis, nos mata». Cuando consiguieron entrar en el piso, el joven se abalanzó contra ellos esgrimiendo el cuchillo, pero los policías consiguieron reducirle, desarmarle y detenerle.
Posteriormente, fue trasladado a la Unidad Psiquiátrica del Hospital de la Paz. Al parecer, el chico padece esquizofrenia y había tenido un brote psicótico, que no era el primero, aunque no de tanta violencia. Los padres habían escondido los cuchillos de la casa para evitar que su hijo pudiera usarlos, por lo que se sospecha que pudo obtenerlo del exterior.
