Tras colocar una pancarta gigante de 430 m2 en plena Gran Vía de Madrid con el lema ‘Las macrogranjas no existen…’, tres escaladores de la ONG ambientalista internacional Greenpeace se han descolgado esta mañana de jueves, 20 de enero, para «rematar» la acción y añadir con pintura a modo de ‘grafiti’ el lema «¡pero cerradlas ya!».
Desde Greenpeace denuncian el «negacionismo» sobre este tema y reclaman el fin de las macrogranjas, de «estas fábricas de carne porque resulta que sí existen y sí contaminan el aire, los suelos y las aguas de amplias zonas rurales».
Inciden en que España es «macrogranja y matadero para Europa. La producción de carne ha crecido de forma brutal en España: casi un 1.000% más desde los años 80; y solo en 2020, se sacrificaron más de 910 millones de animales para consumo humano en nuestro país».