El grupo municipal de Más Madrid ha mostrado su desacuerdo con el plan estratégico para la EMT 2021-2025 presentado hoy por el Gobierno de Almeida, ya que “desaprovecha la herramienta de transformación para la ciudad que es la EMT y proyecta una imagen de la ciudad anclada en el pasado, que sigue girando en torno al coche”.
“La EMT no es solo la empresa de autobuses de Madrid. Es un actor fundamental en la movilidad sostenible de nuestra ciudad y esto no lo vemos reflejado en este plan”, ha lamentado la concejala de la primera fuerza política de la capital Esther Gómez, que ha asistido al acto de presentación. Gómez ha recalcado que Más Madrid «no puede apoyar un plan que no presente un proyecto potente de ampliación de BiciMAD» y en el que no se recoja la creación de la M-35, “que hemos reclamado tantas veces”.
Respecto a BiciMAD, para el grupo municipal que lidera Rita Maestre, pretender ampliar este servicio con solo 2.000 bicicletas es «ridículo», sobre todo «si se compara con las 2.964 bicis que funcionan actualmente en la almendra central y las zonas limítrofes». «No puede ser que una ampliación a una zona que representa dos tercios de la movilidad en Madrid cuente con menos bicis que el centro», ha incidido Esther Gómez.
El dato de 2.000 bicis es lo máximo a lo que aspira el Plan Estratégico de EMT, pero por escrito la compañía ha confirmado que su intención es incorporar 1.200 bicis hasta 2025. “Es decir, que no existe una voluntad real de que esto funcione, sino que se trata solo de inaugurar estaciones, pero sin valor real”, ha denunciado la edil de Más Madrid. Gómez ha pedido que se haga “una ampliación que garantice un buen funcionamiento del sistema, ya que uno mal diseñado provoca muchos problemas de redistribución y ausencia de bicicletas en las estaciones”.
En este sentido, ha recordado que la propuesta de Más Madrid pasa por una ampliación de 9.000 bicicletas y 500 bases. Hay que tener en cuenta también que esta ampliación se llevará a cabo pasando a gestión directa el servicio, que ahora opera EMT con un contrato. «De esta forma acabarán las restricciones que actualmente impone dicho contrato, por lo que no se entiende esa limitación de 2.000 bicis más que por el escaso interés de Almeida en promover el uso de la bicicleta», ha indicado.
La gestión directa de BiciMAD es un proyecto que se inició en el mandato anterior, pero quedó paralizada por falta de apoyos en el Pleno del Ayuntamiento. En noviembre de 2020 se aprobó en el Pleno una proposición de Más Madrid, sin el apoyo de PP y Ciudadanos, para continuar con el proceso que permitirá ampliar el servicio. Ahora el Ayuntamiento ha comenzado este procedimiento, «pero supone una oportunidad perdida dada la escasa ambición de la propuesta. Además, plantea introducir la colaboración público-privada en el sistema, algo que puede poner en riesgo BiciMAD y el servicio público que presta».
«Renuncia a la gestión de los aparcamientos municipales, otra oportunidad perdida»
«A pesar de que la gestión directa por parte de EMT ha demostrado tener importantes ventajas para la ciudadanía, de acuerdo con el Plan Estratégico de Almeida, los aparcamientos municipales no serán gestionados por la Empresa Municipal de Transportes, sino que saldrán a concesión», denuncian desde Más Madrid. De este modo, inciden, «se regalarán los beneficios de los mismos a concesionarios privados, en lugar de emplearlos para mejorar el servicio de transporte público».
La gestión directa de los aparcamientos «es ventajosa para la mejora del transporte público y también para los propios usuarios, ya que permite adaptar los servicios a las necesidades cambiantes de la ciudadanía con mayor agilidad que las concesiones».
Un ejemplo de estos beneficios es, según Más Madrid, «la ampliación del número de puntos de recarga para vehículos eléctricos, ahora que el parque móvil se está electrificando. Mientras las concesiones establecen calendarios para la adaptación, la gestión directa permite que la dotación de los puntos de recarga se incremente a medida que lo hace la demanda». Otro ejemplo sería «la posibilidad de cambiar de forma ágil el número de plazas de rotación y de residentes de acuerdo a las necesidades de los barrios, algo impensable con los contratos de concesión, pero que puede resultar imprescindible en ámbitos con una fuerte presión sobre el aparcamiento».
«Sin rastro de la M-35 del transporte público»
El Plan Estratégico «no habla apenas de nuevas líneas para ampliar el servicio de la EMT y dar un mejor servicio a la ciudad». Pero, sobre todo, «llama la atención que no incluya, ni mencione, la M-35 del transporte público, una propuesta de Más Madrid incluida en los Acuerdos de la Villa». Se trata, según la formación liderada por Rita Maestre, de «un sistema de autobuses rápido de alta capacidad para conectar los distritos exteriores a la M-30, de la que no hay ni rastro en dicho plan».
«Un Plan Estratégico sin participación de los agentes implicados»
A pesar de entregarse a los consejeros de la EMT el pasado abril, no fue hasta el mes diciembre cuando el equipo directivo de EMT dio a conocer el contenido del Plan Estratégico a la oposición. Y lo hizo, ha denunciado Esther Gómez, «enviando la documentación un viernes (17 de diciembre) para que la votación se celebrara en el Consejo de Administración de la EMT del lunes 20 de diciembre, impidiendo así las aportaciones de la oposición y los sindicatos a lo largo del proceso de redacción. Además, la votación se produjo sin tener en cuenta las consideraciones de estos al texto presentado».
Para Más Madrid, esto ha supuesto «una imposición unilateral de un plan que afecta a la totalidad de la gestión de la empresa, sin tener en cuenta a ninguno de los agentes implicados, algo muy grave, ya que incluye aspectos tan importantes como la gestión público-privada de algunas áreas de negocio, cambios sustanciales en las condiciones laborales de la plantilla, como la retribución variable, y la apertura de nuevas actividades que implicarán modificar los estatutos de la empresa”.