Mantener Madrid Central como ZBE (zona de bajas emisiones) cuya eficacia «quedó demostrada» es uno de los objetivos irrenunciables de las 59 enmiendas presentadas por el PSOE a la Ordenanza de Movilidad Sostenible, que se debatirá en un Pleno extraordinario el próximo día 10.
El concejal socialista Ignacio Benito, portavoz del grupo socialista en el área de Medio Ambiente y Movilidad, entiende que Madrid Central “es una línea roja si se persigue de veras que el PSOE vote a favor la ordenanza: “en una ciudad donde cada año mueren 2.000 personas por contaminación con las restricciones costará aún más vidas”.
“Mantener Madrid Central en sus condiciones actuales es una de las líneas rojas innegociables para el PSOE si de verdad Almeida quiere movernos del voto en contra”, ha señalado el edil socialista. “Madrid Central fue una iniciativa del Grupo Municipal Socialista aprobada el mandato anterior y que el gobierno de Manuela Carmena puso en marcha, su eficacia está reconocida a nivel nacional e internacional, y por lo tanto no tiene sentido modificar las características de algo que funciona”.
Dos de las 59 enmiendas presentadas por el PSOE van en ese sentido: mantener el nombre de Madrid Central y ahorrar con ello gasto en la señalización (casi 200.000 euros) de una marca “conocida y reconocida”; y que permanezcan los criterios de acceso a esta zona de bajas emisiones para evitar que unos 15.000 vehículos más entren al centro, durante un tramo horario más amplio que el actual, y durante más años.
«Proteger la bici frente al coche, al peatón frente a todos»
El PSOE ha incluido en sus enmiendas medidas que faciliten una movilidad sin emisiones más saludable y segura, especialmente para ciclistas y peatones que, en su opinión, se encuentran “arrinconados” por el tráfico motorizado. “Gran parte de las enmiendas pretende mejorar una movilidad ciclista tan descuidada en esta ordenanza por el mismo alcalde que está dejando morir BiciMad, el servicio público de bicicleta de nuestra ciudad”, ha señalado.
Con el objetivo de cambiar la actual “ley del más fuerte” por «una en la que prime la protección de los más vulnerables (peatones y ciclistas)», las enmiendas del PSOE proponen, entre otras medidas, una distancia de seguridad de al menos 6 metros cuando un vehículo motorizado circule detrás de una bicicleta, en vez del mínimo de 5 metros que plantea el texto presentado por el Gobierno. También prevé que los ciclistas mantengan respecto a los peatones una distancia de seguridad no inferior a 1,5m cuando compartan espacio.
“Las medidas que proponemos pretenden mejorar la movilidad y la seguridad de quienes se desplacen en bici, aumentando la distancia del resto de vehículos con ellos, priorizar su paso en determinados momentos y también garantizar su aparcamiento, por ejemplo, en parques y zonas verdes, al ser espacios tan favorables para su uso. Y donde actualmente existe conflicto con los peatones, pues al revés. Serán las bicicletas y los patines los que deberán reducir la velocidad para proteger a los viandantes”, resume el concejal socialista, “enmiendas que pretenden hacer más seguro el uso de la bicicleta y priorizar a los ciclistas y a los peatones en una ciudad que cada vez les arrincona más y cede protagonismo al coche”.
«Menos ruido, más diálogo: mesas de movilidad en los distritos»
La contaminación acústica también «provoca enormes trastornos y estrés a la ciudadanía madrileñ»a, y por ello se propone en las enmiendas socialistas que el Ayuntamiento contribuya a apaciguar el ambiente mediante la revisión al menos cada dos años de todos los vehículos “tanto en propiedad como en arrendamiento financiero con o sin opción de compra, así como los vehículos de titularidad de terceros que estén afectos a la prestación indirecta de servicios municipales y la ejecución de obras municipales” en el Centro Municipal de Acústica. Además, por supuesto, de todas aquellas inspecciones puntuales por denuncias o a demanda de los servicios técnicos municipales.
Asimismo, se plantean medidas para la participación ciudadana mediante la creación en todos los distritos (salvo el de Centro) de una Mesa de la Movilidad “con el objetivo de examinar trimestralmente la aplicación y cumplimiento de la ordenanza en sus respectivos ámbitos territoriales, así como de elaborar propuestas para la mejora de la movilidad y la calidad del aire en dichos ámbitos”.
Estas mesas estarán integradas por el área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad, la junta de distrito correspondiente, los grupos políticos municipales, las asociaciones de vecinos y vecinas, las asociaciones de familiares de alumnos de los centros escolares, y las asociaciones y/o colectivos ecologistas, ciclistas o de peatones.