La medida entra en vigor este miércoles, 23 de noviembre, «sin el consenso de los comerciantes, hosteleros y otros numerosos sectores afectados», denuncian.
El presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha pedido al Ayuntamiento de Madrid que paralice «inmediatamente» la entrada en vigor de Madrid Central «hasta que no haya consenso, diálogo y una planificación racional de medidas de este calado».
Además, Garrido ha solicitado que el Ayuntamiento de Madrid presente los informes técnicos que todavía no ha realizado, ante la Comisión Delegada del Consorcio de Transportes, en convocatoria extraordinaria y con un único punto del día.
La petición de la Comunidad de Madrid se suma a las ya realizadas por el PP regional estos días, junto con la petición del portavoz del Grupo Municipal del PP en el Ayuntamiento de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, de convocar un pleno extraordinario que finalmente se celebrará este jueves.
Desde el Gobierno regional se califica a Madrid Central como «un proyecto improvisado» y se critica que su puesta en marcha este miércoles, 23 de noviembre, es «de forma autoritaria, sin haber alcanzado un acuerdo con los comerciantes, hosteleros, padres de alumnos escolarizados en el distrito y todos los demás sectores afectados por el cierre de más de 400 hectáreas de la almendra central».
Consideran que «la protección del medio ambiente debe ir aparejado de medidas alternativas con el fin de no perjudicar a la vida cotidiana de todos los ciudadanos, a quienes tenemos la obligación de ofrecer planes de movilidad pensados a largo plazo y siempre con alternativas».