El sindicato advierte también de «la pasividad del Ayuntamiento de Madrid ante el deterioro de las condiciones laborales que, sin duda, se reflejarán en la pérdida de calidad en la atención del usuario».
Atenzia, una de las tres empresas que actualmente presta servicio junto con Asispa e Ilunion, ganó el concurso ofertado este año «mediante una baja temeraria de los precios y obteniendo así una puntuación muy superior al resto de empresas, en concreto 14 puntos más en la parte económica», denuncian desde CCOO.
En el caso de Asispa, empresa adjudicataria del Lote 2, aparecen categorías profesionales que «no están reconocidas en convenio, y por tanto se encuentran desamparadas en cuanto a sus funciones y salario, los cuales marca cada empresa, asimilándoles en categorías que no recogen la realidad de su día a día, siendo afectados negativamente».
CCOO recuerda que el Consistorio «tiene conocimiento de todo ello, realizando cambios que sin duda afectan a las máximas que promueven el servicio y ellos mismos definieron y así viene desarrollado en la ley 39/2006 fijando a la teleasistencia como un servicio fundamental para nuestra sociedad».
Para el sindicato, «una vez más se evidencia un recorte en derechos y prestaciones sociales haciendo que la responsabilidad social que deberían tener aquellos que nos representan políticamente recaiga cada vez más en entidades del tercer sector, de empresas privadas, para que los colectivos que necesiten ayuda ante una situación de necesidad, queden cubiertos y desprotegidos no recibiendo una atención inmediata. Los usuarios de las unidades de atención domiciliaria están aumentando debido a la gran demanda de los cada vez más mayores y dependientes a los que se atiende en casi cualquier necesidad física o psíquica que nos demanden».
«Los trabajadores y trabajadoras ven mermados sus derechos debido a los cambios estructurales que realizan estas empresas, alegando razones organizativas y económicas, amparados por el artículo 41 y 52 de nuestro estatuto, lo cual se traduce en reducción de personal de atención directa a los domicilios que se atienden, ya que se produce una demora en la atención telefónica», denuncian desde CCOO.
Critican que «en las últimas semanas se vienen acumulando entre 20 y 30 llamadas en espera, a veces hasta 40, muchas de ellas llamadas que necesitan ser atendidas por tratarse de caídas, situaciones de violencia doméstica o incluso situaciones que potencialmente pueden convertirse en muy graves».
Paralelamente, la plantilla también se ve afectada por «la paralización de la negociación del convenio de aplicación desde el 2012, absolutamente amplio y ambiguo que recoge las necesidades de unos servicios tan diversos como ayuda a domicilio, residencias y centros de día (servicios que cuentan con convenios propios en Madrid, que contemplan las diferencias importantes en el caso de todos ellos, y que el servicio de teleasistencia no dispone) y aumentada esa generalidad por ser de aplicación en todo el territorio nacional».
«Esta ambigüedad y generalidad en su redacción, ha sido motivo de infinidad de consultas a la Paritaria a lo largo de estos años, incluso a denuncias ante la inspección de trabajo», concluyen desde el sindicato.