El senador José Cepeda (PSOE), el único político español que en representación del Consejo de Europa ha sido invitado para hablar de populismo y los medios de comunicación en el Foro Mundial por la Democracia, ha explicado que el populismo no es un problema, sino un peligro para las democracias en el mundo.
El senador socialista ha sido invitado para tratar la realidad de la eclosión del populismo en el mundo y su relación con los medios de comunicación. En su intervención, Cepeda ha afirmado que “el populismo es un auténtico virus que puede infectar cualquier democracia y con sus líderes, sus discursos y sus herramientas, puede minar desde dentro del sistema a cualquier país, generando una enfermedad que puede ser letal para la libertad de millones de personas en el mundo”.
“En Europa existen hoy 236 partidos populistas en 33 países y se ha consolidado como la tercera fuerza política de Europa, una evolución inimaginable hace tan solo 10 años”, ha explicado.
Un peligro global analizado como un problema local
José Cepeda, que ha participado en una mesa junto a la prestigiosa periodista keniata Uduak Amimo y el belga Jean Paul Philippot, Presidente de la Unión Europea de Radiodifusión y administrador general de Radio Télévision Belge de la Communauté Française (RTBF), ha tratado también las consecuencias populismo en los medios públicos de comunicación y los riesgos que suponen para nuestras democracias.
En este contexto, ha sugerido proteger los medios de comunicación públicos, a sus profesionales, salvaguardar su independencia de los gobiernos e invertir en su desarrollo tecnológico para que sean la mayor referencia “de la verdad” dentro de Internet.
“El populismo no tiene ideología, es supuestamente de derechas en Francia, Reino Unido, de ultraderecha en Austria, de izquierdas en España o incluso nacionalista en algunas regiones del mundo como Cataluña.”- afirmó- “El único objetivo del populismo es alcanzar el poder para liquidar un sistema democrático, manifiestamente mejorable pero democrático y plural y construir uno nuevo basado en un único líder y con actitudes claramente totalitarias” explicó el senador.
Los nuevos métodos soviéticos hoy en la Red
Los viejos sistemas de propaganda comunistas, se han optimizado cien años más tarde de la revolución rusa y están generando auténticas fábricas que generan millones de noticias faltas (fake news) e inundan las redes, para influir en las democracias.
El senador español denunció como existen industrias dedicadas a generar millones de perfiles falsos en las redes sociales, desarrollar algoritmos que analizan los gustos, los amigos y los deseos no tan solo comerciales, sino ideológicos de millones de personas en el mundo generando un Big Data global con el que bombardear en momentos muy críticos a la población e influir y manipular las tendencias en los
procesos democráticos.
La desinformación al poder
En opinión del senador “el viejo periodismo de calidad no debe rendirse, lamentablemente hoy se trabaja movido por la inmediatez, fabricando noticias como si de una agencia de noticias se tratara y no se verifican las informaciones que en muchas ocasiones utilizan fuentes falaces de las redes sociales.
Existen estructuras mundiales diseñadas, dispuestas a desestabilizar países, generar populismo y romper muchas democracias, pero con el objetivo de hacer realidad, no lo sueños de libertad de las personas, sino para subir y bajar activos financieros en todas las bolsas del planeta, en el lugar y el momento que determinen.
«Twitter, Facebook y Youtube deben responsabilizarse de lo que difunden»
“El protagonista del Brexit atribuye su éxito a YouTube, y el director de campaña de Trump a Facebook. ¿Qué está sucediendo en el mundo? ¿Las redes sociales no son medios masivos de información? ¿Deberían estar reguladas? ¿o autorreguladas?”- se preguntó.
“Las grandes compañías que han creado las grandes redes sociales, deben asumir que son grandes medios de comunicación de masas y responsabilizarse de sus contenidos como lo hacen el resto de los medios de comunicación”, añadió.
“Facebook, Twitter y YouTube de Google, deben verificar sus usuarios y evitar robots de propaganda subversiva, xenófoba, racista, fascista o antidemocrática. No soy partidario -afirma Cepeda- de su regulación pero si de que cumplan códigos éticos y deontológicos como lo hacen los profesionales de la comunicación e impidan que existan usuarios que desarrollen plataformas de difusión de contenidos ilegales, campañas masivas de difamación, mentiras y acoso a gobiernos, instituciones o personas, sin control.”
Por ultimo realizó un llamamiento a los profesionales de la información que dejaron atrás la buena costumbre de cotejar las informaciones, al menos por tres fuentes fiables, para volver a recuperar un buen quehacer informativo de calidad: “Quizás para ello también deberíamos de olvidar el yugo de la “inmediatez” en la información que prácticamente ha convertido a todos los periodistas en micro agencias individuales de noticias, priorizando el valor de la cantidad por encima de la calidad.”
“Necesitamos luchar por la verdad, con toda su diversidad y pluralismo, pero por la verdad en definitiva, porque ello nos llevará a sociedades que podrán analizar, pensar y reflexionar sobre la realidad que nos rodea. Debemos combatir la sociedad del desconocimiento y propiciar desde la política más confianza, más credibilidad en las instituciones y hacer ciudadanos libres que no se dejen embaucar por falsos eslóganes populistas que solo buscar que crezca la hierba de la sinrazón, el odio y el sentimiento del resentimiento», reivindicó el senador Cepeda.
“Si no lo conseguimos seremos una generación condenada a repetir los mismos errores del pasado y vivir lo peor de nuestra historia. Aun estamos a tiempo de evitarlo”- concluyó el senador madrileño.