El Ayuntamiento de Madrid, a través de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (EMVS), ha oficializado este miércoles la compra de diez viviendas a la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb). Con la firma de esta operación se completa la adquisición de 108 inmuebles por parte de la EMVS a la Sareb que se ha realizado en varias fases.
El titular del Área Delegada de Vivienda y presidente de la EMVS, Álvaro González, ha destacado que “la compra de viviendas en el mercado secundario es uno de los ejes que estamos poniendo en marcha para ampliar el parque de vivienda en alquiler asequible y, a pesar de los momentos tan complicados que hemos pasado, lo estamos haciendo a un ritmo extraordinario”.
La EMVS no solo ha adquirido 108 viviendas a la Sareb, también compró el año pasado 19 pisos a la Seguridad Social y ya lleva compradas otras 48 en el mercado secundario, en un programa especial para incrementar el patrimonio residencial del Ayuntamiento, con el objetivo de poner en el mercado nuevas viviendas protegidas en alquiler.
Con esta última operación, son ya 175 las viviendas adquiridas por el Ayuntamiento en el mercado secundario desde que José Luis Martínez-Almeida es alcalde de la Madrid, cifra que destaca especialmente si se compara con las 48 que se compraron en el pasado mandato o con las 538 adquiridas a lo largo de los 40 años de vida de la EMVS, lo que supone que en solo dos años las viviendas adquiridas suman un tercio de las compradas por la empresa pública en toda su historia.
La Sareb cedió las 108 viviendas a la EMVS en enero de 2016 para que el Ayuntamiento de Madrid pudiera destinarlas al alquiler público. De hecho, algunos de estos pisos fueron incluidos en los programas sociales de la EMVS como son el realojo de residentes de los poblados de La Cañada Real o el Gallinero, el programa de emergencia residencial, el programa ‘Housing First’ para personas sin hogar o el programa para realojar a mujeres víctimas de violencia de género.
El convenio de cesión finalizaba en 2024, por lo que antes que devolver las viviendas y realojar a los inquilinos en otros inmuebles, la EMVS decidió adquirirlas, teniendo en cuenta que ya había hecho una importante inversión para reformarlas y que los precios de compra pactados han sido, de media, un 25 % inferiores a los precios de mercado. Con esta última fase de diez viviendas, el coste total de la operación ha ascendido a 13,3 millones de euros.