Artículo de opinión por Carmen Esteban Sanz, estudiante de derecho y ciencias políticas en la UC3M.
El hasta ayer vicepresidente segundo del gobierno ha anunciado que deja su puesto en el ejecutivo para concurrir como candidato por Podemos a la Comunidad de Madrid. Yolanda Díaz ocupará el liderazgo de la formación morada dentro del gobierno de manera simultánea junto con su ministerio.
¿Por qué Iglesias ha dado este giro de ciento ochenta grados?
El declive de Podemos venía siendo imparable a causa del auge de los socialistas y la desafección de aquellos que han percibido a los morados como parte del establishment una vez comenzada su andadura en el Gobierno de España, solo una acción como la llevada a cabo por su presidente podría frenar en seco su posible desaparición. Madrid constituye uno de los núcleos duros de los morados, si cae Madrid caen todos.
En la actualidad disfrutan de 7 escaños en la Asamblea madrileña, lo que hace un total del 5,3% de los votos emitidos en las últimas elecciones (2019). Respecto a la convocatoria de 2015 constituyen únicamente el 25% de los votos recibidos por los morados, es decir, en una legislatura perdieron el 75% de sus votos. Iglesias ha visto en la decisión de Ayuso una oportunidad de sortear la pérdida de representación en la cámara madrileña y, además, de arrebatarle votos a su principal adversario, Más Madrid.
Si el declive de Podemos en la Comunidad de Madrid no se frena de inmediato la formación de Iglesias podría no sobrepasar la barrera electoral lo que les impediría convertir sus votos en escaños directos, en otras palabras, podrían no obtener escaños. Con este anuncio Iglesias acaparará los medios y conseguirá repercutir no solo en Madrid sino en el resto de España.
Objetivo número 2, destruir desde la raíz la formación de Errejón. En su anuncio el vicepresidente ha propuesto a los verdes concurrir de manera conjunta a la convocatoria con la finalidad de evitar un nuevo gobierno de Ayuso. Esta idea no ha sido acogida con mucho entusiasmo por los integrantes de Más Madrid, quienes hoy han hecho pública la decisión de rechazarla, ya que desembocaría en una fagocitación de su grupo por parte de los morados al más puro estilo Izquierda Unida. Esta propuesta se podría percibir como una vendetta personal de Iglesias hacia su antiguo compañero de bancada Íñigo Errejón. Ambas formaciones se roban votantes entre sí dada similitud de sus programas políticos y su discurso. ¿Bajará al barro Errejón y se presentará como candidato? En principio será su compañera de filas Mónica García la que encabezará la lista de Más Madrid aunque ante tanta incertidumbre y terremoto político nadie pone la mano en el fuego.
El tercer objetivo de Iglesias, dar una bocanada de aire fresco a su partido. De esta manera rechaza la teoría del apoltronamiento y deja paso, como dice en sus declaraciones, a nuevos legados morados. Los votantes de Podemos han manifestado en más de una ocasión que sería ideal dejar que otras voces de su formación fueran escuchadas y ayer fue acatada esta orden. Además, este vuelco de los acontecimientos creará certeza ante la inseguridad judicial de la candidata madrileña, Isa Serra, y los procesos judiciales aún abiertos en su contra.
Por último y más importante, darle el relevo a Yolanda Díaz como representante de su grupo dentro del ejecutivo, paso previo a designarla como candidata a las generales por Unidas Podemos y un golpe difícil de esquivar para el PSOE. Yolanda es una política con gran carisma que se ha ganado el respeto de muchos españoles que ni siquiera se identifican con su ideología, ha conseguido pactos inimaginables con la patronal y ha trabajado realmente duro dentro del Ministerio de Trabajo, poco ruido y muchas nueces en su caso. Díaz es la mejor valorada dentro de los votantes morados pero también entre los socialistas y los de Más Madrid.
Que tiemble el Congreso que viene Yolanda.
