El proceso de peatonalización de la zona de la madrileña Puerta del Sol dará comienzo el próximo 20 de agosto, momento en el que se cerrará totalmente al tráfico la plaza.
En concreto, se cerrará a los vehículos a motor, sin hacer uso de vallas, la calle Mayor, la calle Alcalá (entre Sevilla y Sol), la carrera de San Jerónimo (desde la plaza de Canalejas) y las calles Espoz y Mina y Victoria. Posteriormente, ya a partir de enero del 2021 comenzarán las obras.
El proyecto que pondrá en marcha el Consistorio en la Puerta del Sol se basará en la propuesta ganadora del concurso ‘Piensa Sol’ que el Ayuntamiento y el COAM convocaron en 2014 con el objetivo de avanzar en el diagnóstico de los problemas de este espacio y reflexionar sobre las posibles soluciones.
Dicha propuesta, presentada por los arquitectos José Ignacio Linazasoro y Ricardo Sánchez, quedó en el aire entonces por el cambio de Gobierno municipal, ahora se va a recuperar y servirá de base para el proyecto definitivo que redactarán los ganadores del concurso de la mano de los servicios técnicos municipales.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida ha explicado que con la remodelación de la Puerta del Sol “cumplimos con uno de nuestros compromisos adquiridos con Madrid 360, la estrategia medioambiental de este equipo de Gobierno, que era la peatonalización de la plaza. Dijimos que íbamos a crear una gran zona de cero emisiones en el centro de Madrid como compromiso de este Ayuntamiento con los retos del futuro de las grandes ciudades, que son la movilidad y la sostenibilidad”.
Unas acciones que se van a complementar con la restricción a la circulación de los vehículos privados “ofreciendo a la ciudadanía alternativas, como son las dos nuevas líneas de transporte público gratuito, de cero emisiones y cero coste para los usuarios”.
Además, la propuesta busca recuperar el orden y la forma del espacio reagrupando las funciones, ordenando los elementos de la plaza y eliminando los elementos «antiestéticos». En este sentido, en el arco norte se situaría una zona estancial formada por bancos de piedra que delimitarían el área comercial respecto al vacío central. Esto permitiría definir un eje comercial, garantizando así cierta autonomía respecto al centro de la plaza.
Otros elementos de la plaza ocuparían el centro del espacio, en la banda este-oeste, de manera que se localizarían en el lugar donde confluyen los ejes de las diferentes calles que desembocan en la plaza. Su diseño definitivo será objeto de una ulterior elaboración junto con los servicios técnicos municipales.
Los monumentos se situarían en el arco norte y en el eje lineal este-oeste. Las estatuas de la Mariblanca y del Oso y el Madroño estarían en el arco norte delimitando el área de bancos que serviría de base a los monumentos. La ecuestre de Carlos III se dispondría en el eje lineal este-oeste en posición girada, focalizando la portada de la Real Casa de Correos.
En ambos extremos del eje lineal este-oeste se localizarían dos pabellones contenedores de los kioscos, ascensores y salidas del metro. Con ello se pretende acabar con la dispersión y se remataría el eje a la vez que se deja libre el resto de la plaza. Estos pabellones contenedores recuperarían la imagen de los antiguos, que resultaban por su escala mucho más adecuados al espacio que los actuales.
Asimismo, se propone una iluminación homogénea de los edificios que delimitan la plaza y un tratamiento unitario de los bajos comerciales para devolverle la integridad que nunca debió perder. Todas las obras serán ejecutadas por el Área de Obras y Equipamientos que dirige Paloma García Romero.
Nuevos concursos internacionales
Mientras los servicios técnicos municipales trabajan en el proyecto definitivo de la Puerta del Sol, el Ayuntamiento y el Colegio de Arquitectos prepararán un nuevo concurso que inaugure una serie de convocatorias que tendrán como hilo conductor el gran eje norte-sur de la ciudad entre el paseo del Prado y la Castellana.
El Consistorio considera que es el momento ideal teniendo en cuenta que en ambos extremos de este eje se van a remodelar las dos grandes estaciones de ferrocarril de la ciudad, Atocha y Chamartín, lo que supondrá a su vez una importante repercusión en sus entornos urbanos.
En este sentido, se ha señalado que su intención es convocar un concurso internacional junto con el COAM, “es obvio que el eje norte-sur de la ciudad es uno de los ejes estratégicos más importantes y desde el punto de vista urbanístico tiene una extraordinaria relevancia, donde además ya se están produciendo hitos importantes como las remodelaciones de las estaciones de Atocha y Chamartín, la operación Madrid Nuevo Norte, la remodelación del estadio Santiago Bernabéu, el paseo de Carlos V o la próxima reforma de las torres de Colón”.
También se ha incidido desde el Ayuntamiento en la necesidad de que exista “un periodo de reflexión sobre cómo acometer el eje Prado-Recoletos, un eje cultural extraordinario y sin parangón en cualquier otra capital europea y que creo que merece que entre todos le demos una vuelta desde el punto de vista urbanístico porque va a afectar al eje norte-sur del paseo de la Castellana”, a la vez que ha subrayado que “nuestros principales focos de atención se van a poner en la plaza de Carlos V, entrada de millones de visitantes a la ciudad cada año, y la plaza de Colón”.
De hecho, el primero de los concursos internacionales tendrá por objeto la remodelación de la glorieta de Carlos V y el frente de la estación de Atocha hasta el Pabellón de los Hombres Ilustres. Además, se incluirá la plaza y entorno del Museo Reina Sofía, que requiere también una actuación que dote de homogeneidad e integridad a este espacio.
“Todas las acciones urbanísticas tienen un único objetivo, ganar el futuro para la ciudad de Madrid; queremos una ciudad del siglo XX y por ello la remodelación de la Puerta del Sol, que se inicia simbólicamente en el llamado kilómetro cero, es solo el punto de partida de muchas acciones futuras”, han expuesto.
