- Las obras de restauración arqueológica de esta infraestructura construida en el siglo XVII han consistido en la consolidación y rehabilitación de todos los elementos históricos con la participación de un equipo de arqueólogos.
- Esta infraestructura hidráulica recogía el agua del subsuelo en el norte de Madrid para llevarla a través de galerías al centro de la ciudad. La obra ha supuesto una inversión de 323.393,53 euros con un periodo de ejecución de tres meses.
- Los visitantes pueden disfrutar de dos itinerarios guiados de forma gratuita y acceder a la zona restaurada.
La delegada del Área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Inés Sabanés, ha visitado la restauración arqueológica de un tramo del Viaje de Agua de Amaniel. La instalación fue mandada construir en 1613 por Felipe III para el suministro hídrico de Madrid a imitación de los mayrat (cursos de agua) árabes y es el primero de estos viajes que se ha rehabilitado en la ciudad de Madrid.
La zona recuperada tiene una longitud aproximada de 50 metros y está compuesta por varias galerías subterráneas que obtenían agua del subsuelo. Después se almacenaba en un arca principal de distribución y de ahí se conducía hasta el centro de Madrid.
Se han documentado varios trazados de viajes de agua, con un total de 70 kilómetros en toda la ciudad, alguno de los cuales también serán restaurados como ejemplo del esfuerzo que realiza el Ayuntamiento para la conservación de su patrimonio histórico.
El objetivo de la rehabilitación, que se ha realizado en estrecha colaboración con la Asociación de Vecinos San Nicolás, la Asociación Cultural de Amigos de la Dehesa de la Villa y la Plataforma Salvemos la Dehesa de la Villa, ha sido garantizar su conservación como patrimonio y acondicionarlo para realizar visitas de carácter divulgativo. Con una inversión de 323.393,53 euros, impuestos incluidos, la obra ha tenido una duración de tres meses.
Este tramo, que pertenece al que se conocía como Viaje de Palacio porque abastecía de agua a la residencia real, es el único conservado en Madrid que reúne las condiciones idóneas de accesibilidad para proceder a su divulgación. Por este motivo se eligió para su puesta en valor como recurso didáctico sobre la gestión del agua que realiza el Ayuntamiento.
El nombre actual procede de la antigua Dehesa de Amaniel, situada en la actual Dehesa de la Villa, que es donde se capta el agua del nivel freático. El acceso a las galerías se localiza en el parque del Paseo de Juan XXIII, a la altura del número 23 de dicha vía urbana, cuya construcción en 2005 dejó al descubierto las galerías y el arca de distribución.
En el enclave se ubican tres galerías de ladrillo con una longitud de entre 60 y 90 metros, que disponen de pozos de ventilación y de acceso, así como de hornacinas en las paredes para colocar luminarias. Actualmente se encuentran bloqueados por muros de reciente construcción ya que pasan por debajo de edificios contemporáneos.
El viaje sigue recogiendo agua
Las deficiencias más comunes observadas en el Viaje del Agua han sido el desprendimiento de materiales constructivos y la degradación de algunas zonas por los altos niveles de humedad y el abandono prolongado. Este tramo histórico sigue captando agua del subsuelo, por lo que hay zonas en las galerías con importantes niveles de agua, incluso en verano, y otros que se anegan en épocas de lluvia.
Las obras de restauración han consistido en la limpieza del interior de los túneles y extracción de fangos, lodos y restos de raíces, actuando sobre un total de 242 metros lineales. También se han reparado los elementos degradados y se han sustituido los ladrillos en mal estado por nuevas piezas elaboradas con la misma composición que los materiales originales.
En todo momento ha habido un control arqueológico de los movimientos de tierras y de los trabajos de restauración, que han permitido recuperar el sistema original de drenaje y circulación de las aguas que discurren por las galerías a través de las canalizaciones originales con bolos de piedra. Todo ello gracias a un trabajo de investigación en archivos y documentos históricos. Además, frente a la entrada del Viaje del Agua se ha rehabilitado la zona ajardinada que contiene los restos del arca de distribución.
Para la divulgación del enclave arqueológico se ha elaborado un tríptico informativo, un audiovisual que explica la restauración de Amaniel y difunde la historia de los viajes de agua y se han instalado paneles explicativos en la zona exterior del parque.
Visitas guiadas gratuitas
El departamento de Educación Ambiental del Área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid organiza visitas guiadas gratuitas para conocer en profundidad la historia y las curiosidades que giran en torno a algunos de los viajes de agua del subsuelo madrileño.
Actualmente se están llevando a cabo dos itinerarios:
– Desde Dehesa de la Villa (o Dehesa de Amaniel) hasta Caño Gordo, donde se encuentra el tramo visitable del Viaje de agua de Amaniel. Este itinerario muestra la parte de captación de agua, desde las fuentes de suministro en la Dehesa con sus característicos capirotes, hasta el arca cambija, donde se almacenaba y clarificaba el agua antes de su distribución.
– El segundo de los trayectos visitables transcurre entre el desde Caño Gordo hasta el Caño del Peral (plaza de la Ópera), donde las personas asistentes pueden visitar los vestigios de la fuente en la que acababa parte del agua de este viaje. Este itinerario se puede considerar el viaje hasta las zonas de suministro que eran el Palacio real, casas nobles y conventos, así como alguna fuente pública.