por IGNACIO PANTOJA
Este día es importante para dar a conocer, y ayudar a comprender a un colectivo frágil que está en riesgo de exclusión por sus características, sus dificultades de relación social y laboral, y ello a pesar de que en muchos casos, pueden alcanzar logros sociales o tener títulos universitarios, lo que les hace aún más invisibles para la sociedad.
Los Trastornos del Espectro Autista (TEA) van desde el autismo de Kanner hasta el síndrome de Asperger; siendo algunos no verbales y otros aunque verbales presentan grandes dificultades para socializarse o hacerse comprender.
Es un colectivo que sufre bullyng y ghosting desde que son muy pequeños y durante el resto de su vida y sobre todo en el colegio, instituto y centros de trabajo.
Por ello es necesaria una ayuda y comprensión para las dificultades que viven las personas de este colectivo:
Por eso, este día, es importante para concienciar a la sociedad sobre los TEA, acerca de su especial sensibilidad, fragilidad y temor a afrontar problemas de la vida que para otras personas no lo son. Esa falta de conocimiento de la sociedad hace que ésta no sea consciente del daño que se puede hacer al no comprender lo que no es habitual o «normal, o actuar discriminando lo que es diferente.
También es importante, este día, para proteger a los niños y adolescentes con TEA del bullyng o el ghosting que puedan producir los maltratos en colegio, instituto y universidad, así como preparar terapeutas y orientadores o cuidadores, vigilantes de los recreos y las clases de gimnasia, donde suelen manifestarse las conductas de exclusión o maltrato.
Es importante, desarrollar y apoyar instituciones que, como en el ámbito de Madrid, trabajan la fundación «Ángel Rivierè» que se preocupan por ayudar las personas adultas con TEA cuando los padres empiezan a ser ancianos, para evitar que lleguen a situaciones de exclusión, o a estar parados sin persepectivas, o desprotegidos en su ámbito laboral y social.; o la Asociación Asperger Madrid, que trabaja fundamentalmente con niños y adolescentes.
Por ello, este día, una vez más, reclamamos que las instituciones públicas tomen conciencia de su responsabilidad en el apoyo que es preciso dar a estas personas con Trastornos del Espectro Autista, y que la sociedad conozca sus características y sus problemas, a fin de trabajar por conseguir un mundo más igualitario y justo.