Aún el invierno no ha terminado, el frío continua, y nos tenemos que abrigar las manos pero cuando tenemos niños pequeños nos pasamos la mayoría del tiempo buscando los guantes de nuestros peques o bien a menudo tenemos que comprar otros, porque nunca sabemos donde los hemos puesto, o cuando salimos a la calle, de nuevo, los hemos perdido.
Pues bien, el otro día estuve en casa de una amiga, y descubrí su truco para no perder los guantes de su pequeña, es una gran idea que no puedo dejar de compartir con todos vosotros, es muy fácil.
Necesitamos para empezar:
- Un trozo largo de cinta, lana o hilo.
unir con una cinta o una lana los guantes de manera que esta cruce de una manga a otra y sobresalgan de la chaqueta o abrigo como unos diez centímetros aproximadamente, cuando pongamos la chaqueta a nuestro hijo tener en cuenta que la lana quede en la espalda para que así no moleste y no se pueda enredar o causar alguna molestia al niño.