El 15 de noviembre se celebra el Día Mundial sin Alcohol. El Hospital público 12 de Octubre de la Comunidad de Madrid ha puesto en marcha el ‘Proyecto Ulises’ con el que los pacientes con trastorno por adicción al alcohol descubren experiencias y valores positivos perdidos o suplantados por la adicción.
Se trata de dos módulos de psicología positiva que se han incorporado al programa Ayúdate, Ayúdanos que, desde 2007, desarrolla el Servicio de Psiquiatría del hospital y que atiende a 400 pacientes al año. ‘Proyecto Ulises’ se ha creado en colaboración con el departamento de Personalidad, Evaluación y Psicología Clínica de la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid.
El ‘Proyecto Ulises’, que acaba de arrancar con dos grupos formados por 25 pacientes, tiene como objetivo mejorar la recuperación de los pacientes, aprendiendo, por un lado, a disfrutar de las experiencias diarias de la vida y, por otro, facilitándoles el crecimiento en valores que la adicción suplantó.
La iniciativa surge, tras la comprobación, de que la persona adicta, a pesar de que logre la abstinencia, sigue sintiendo que daría lo que fuese por volver a beber, por ser la persona que era antes. De ahí, explica el doctor Gabriel Rubio, jefe del Área de Gestión Clínica en Psiquiatría y Salud Mental del Hospital 12 de Octubre, que estos módulos estén orientados a que los pacientes adquieran nuevos valores y que sean estas nuevas fortalezas las que construyan una nueva personalidad: “ya no se identificaría con la persona del pasado, si no quizás, con un buen padre o una buena persona, alguien que merece ser escuchado con respeto tras años de recuperación”.
El primer módulo consiste en aprender a identificar las emociones positivas, en buscar estímulos agradables (distintos del alcohol) y disfrutar de ellos. Los pacientes aprenden también que un estado de ánimo positivo facilita la motivación y la consecución de las metas. Según el doctor Rubio “los pacientes dependientes del alcohol se encuentran tristes por el gran vacío que tienen al no beber alcohol. Antes era el único estímulo positivo que buscaban. Ahora, que no beben, les cuesta disfrutar y es importante que aprendan a alegrarse y valorar tantas cosas que nos ocurren en el día a día”.
El segundo módulo está basado en la importancia que tienen los valores y el crecimiento personal para mantener un estilo de vida en sobriedad del que los pacientes se sientan orgullos, de ahí que tengan que reflexionar sobre cuáles son las fortalezas que tenían y/o siguen teniendo y que les servirán para mantener su recuperación «como el mástil del barco de Ulises le permitió no desviarse de su viaje a Ítaca para reencontrarse con su mujer, con Penélope. Que tengan claro cuáles son sus auténticas metas en la vida y que sepan planificar cómo alcanzarlas” concluye.
El primer módulo del Proyecto Ulises se incorpora al Programa para pacientes con trastorno por adicción al alcohol cuando el paciente lleva dos meses en abstinencia y el segundo módulo cuando llevan catorce.
Proyecto Ulises se ha creado en colaboración con el departamento de Personalidad, Evaluación y Psicología Clínica de la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid.
DETALLES DEL PROGRAMA AYÚDATE, AYÚDANOS
El Programa para pacientes con trastorno por adicción al alcohol «Ayúdate, Ayúdanos» tiene una duración de dos años aproximadamente y está estructurado en cuatro módulos. En la primera fase se procede a la desintoxicación de los pacientes con dependencia del alcohol, con un tratamiento farmacológico de soporte y seguimiento diario tanto por enfermería como por el psiquiatra responsable. Además, el paciente es incluido, desde el comienzo, en un grupo psicoterapéutico de acogida que favorezca la conciencia de enfermedad, la adhesión al tratamiento y dé apoyo en estas primeras semanas de tratamiento.
Tras esta primera fase, los pacientes pasan a un primer grupo psicoterapéutico específico para la Prevención de recaídas, donde continua la supervisión de enfermería y el seguimiento psicológico y psiquiátrico.
Posteriormente, existe una fase de terapia grupal en habilidades sociales y otra fase final de preparación para el alta terapéutica. Además, existe un grupo terapéutico de bebida controlada para pacientes donde el objetivo terapéutico, dadas sus características personales o historia previas de intentos fallidos, no hace plantearse por el momento la abstinencia como objetivo a conseguir.
El equipo del Programa de Alcohol integra a las Asociaciones de Mutua Ayuda. Este Programa recibió en 2015 el segundo premio Albert Jovell al programa de tratamiento de la dependencia alcohólica Ayúdate-Ayúdanos y en 2016 el Tercer Premio Hospital optimista por el programa de tratamiento de la dependencia alcohólica Ayúdate-Ayúdanos.