El Hospital Ramón y Cajal ha tratado ya a 105 pacientes con cáncer de próstata con un pionero hidrogel radiopaco que reduce los efectos secundarios

Gacetín Madrid

 El servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario Ramón y Cajal puso en marcha en octubre de 2020 un nuevo protocolo de tratamiento para aquellos pacientes que se tratan con radioterapia para el cáncer de próstata.

Desde entonces, se han tratado 105 casos a través de la colocación de un hidrogel espaciador radiopaco entre la próstata y el recto lo que contribuye a disminuir de manera significativa los posibles efectos secundarios que la radioterapia pueda producir en el mismo.

La implantación de dicho protocolo ha sido posible gracias al trabajo de un gran equipo multidisciplinar compuesto por el servicio de Oncología Radioterápica, Anestesiología y Reanimación, Radiofísica y profesionales de enfermería.

Precisión y menor toxicidad

Según la jefa de sección de Braquiterapia del Servicio de Oncología Radioterápica y Personal Investigador Clínico Asociado (PICA) del IRYCIS, la Dra. Asunción Hervás, esta técnica permite a los pacientes que se someten a tratamiento radioterápico conservar una mejor calidad de vida después del mismo. También agiliza el flujo de trabajo ya que su radiopacidad permite planificar directamente en TAC reduciendo la necesidad de tener que hacer una RM.

La radioterapia es un pilar fundamental en el tratamiento del cáncer de próstata y debido a los grandes avances tecnológicos en los últimos años, tanto de la radioterapia externa como de la braquiterapia, las guías de práctica clínica internacionales y nacionales (ASTRO, ESTRO y SEOR) recomiendan como una de las opciones de tratamiento esquemas de hipofraccionamiento moderado y también hipofraccionamiento extremo, permitiendo administrar una dosis más alta en un tiempo más corto lo que conlleva grandes ventajas para el paciente y el sistema sanitario.

Esta reducción de los tiempos de tratamiento ha supuesto una gran ventaja durante la pandemia, al reducir las visitas al Hospital Universitario Ramón y Cajal y agilizar el proceso de tratamiento reduciendo las posibilidades de contagio por COVID-19. Este nuevo hidrogel radiopaco actúa creando una barrera física entre la próstata y el recto de aproximadamente 1,3 cm. El hidrogel, como su propio nombre indica, está compuesto mayoritariamente por agua lo que permite que, al cabo de 6 meses, se reabsorba por completo.

Pioneros en Europa

El Hospital Universitario Ramón y Cajal ha iniciado la técnica de hipofraccionamiento extremo mediante SBRT en 5 sesiones, a la vez que se ha implantado el protocolo de inserción del hidrogel espaciador radiopaco para permitir la administración del tratamiento de la manera más segura. En octubre de 2020 se utilizó la primera versión del mismo, no visible en TAC y desde 2021 se empezó a utilizar la nueva formulación, con contraste yodado y visible en TAC, situando al servicio de Oncología Radioterápica que dirige la Dra. Sonsoles Sancho García, PICA del IRYCIS también, a la cabeza de los hospitales europeos en utilizar este hidrogel visible en TAC.

Esta técnica se realiza en el quirófano de Oncología Radioterápica, bajo sedación profunda y es llevada a cabo por el oncólogo radioterápico bajo control ecográfico. El hidrogel se introduce en el paciente con ayuda de una fina aguja y se inyecta en el espacio entre la próstata y el recto; una vez dentro, el compuesto, inicialmente líquido, polimeriza para adquirir una textura de gel sólido que permanecerá así entre 3 y 6 meses.

Con la colocación del hidrogel espaciador se consigue alejar la dosis de radiación de la pared rectal lo que conlleva una disminución en los posibles efectos secundarios en dicho órgano, con la consiguiente mejoría en la calidad de vida de los pacientes.

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