Dar a conocer el funcionamiento del sistema de detección del riesgo social y protección a la infancia en el Ayuntamiento de Madrid. Este ha sido el objeto del encuentro que han mantenido hoy la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, acompañada de la delegada de Equidad, Derechos Sociales y Empleo, Marta Higueras, con el pianista británico y activista a favor de la protección de menores, James Rhodes, en el centro de Atención a la Infancia (CAI) de Latina.

Una visita que, para la alcaldesa, tenía un objetivo claro: “hacer una reflexión sobre el drama que supone la violencia contra la infancia”. Por ello agradeció a Rhodes  su activismo en esta lucha. “Explicar lo que a uno le ha pasado, esas cicatrices que se van a quedar para toda la vida, es de una valentía que hay que reconocer”.

En el encuentro la delegada de Equidad, Derechos Sociales y Empleo, Marta Higueras, desgranó los recursos y los programas de atención que tiene el Ayuntamiento e hizo un retrato a grandes rasgos de la magnitud que tiene este problema en nuestro país y en nuestra ciudad.

“Queremos poner encima de la mesa todo lo que hemos hecho para que se sepa que todos los demás tienen que seguir actuando. Una Administración puede hacer pero tiene que haber una implicación del conjunto de la sociedad para asumir lo inaceptable de estas conductas”, aseguró Carmena, para quien la diversidad de programas e iniciativas municipales obedece a un hecho: “queremos ofrecerles el afecto, la orientación y la seguridad que les falta”.

Un aspecto en el que insistió Rhodes. “Para los niños que no tienen nada este es probablemente el único lugar seguro. Otra vez Madrid lidera una manera de ser”, ha incidido.

Los CAI, junto con los Servicios Sociales de atención primaria, atienden a las familias en las que existen graves disfunciones que colocan a los menores en situación de desprotección, riesgo o desamparo. Su objetivo prioritario es ofrecer ayuda y competencias a estas familias para que puedan prestar un mejor cuidado a sus hijos y evitar la adopción de medidas de protección que desembocaría en la separación de los menores de su entorno familiar. En los casos en que se produce esta situación, los profesionales trabajan para favorecer su reincorporación a la familia del modo más rápido y adecuado.

La red de atención de la dirección de Familia e Infancia, a través de los CAI y el resto de programas, atiende anualmente a 60.000 menores y a 50.000 familias en sus programas municipales.