La directora general de personas mayores y servicios sociales, Soledad Frías, ha asistido esta mañana a la presentación de la campaña “Calles en Blanco” que, organizada por la Fundación La Caixa, y la Fundación Pasqual Maragall, en colaboración con el Ayuntamiento de Madrid, pretende concienciar, en vísperas de la celebración del Día Mundial del Alzhéimer, el 21 de septiembre, sobre esta enfermedad que afecta a unas 800.000 personas en España.

Para ello, desde este miércoles, día 19, y hasta el sábado, 22 de septiembre, diferentes calles del barrio de Ópera perderán su nombre como forma de visibilizar uno de los primeros síntomas de esta enfermedad como son los olvidos y las pequeñas pérdidas de memoria puntuales.

Durante la presentación, Frías ha destacado el apoyo incondicional del Ayuntamiento a iniciativas como esta, señalando que “Madrid es una ciudad amigable no sólo con las personas mayores, sino con todas las personas”.

La directora general ha afirmado además que el Consistorio intenta estar cerca de los enfermos, sus familiares y cuidadores, siendo consciente de que hay que dedicar recursos económicos en los presupuestos de cada año, aunque, ha añadido que “todos los esfuerzos son pocos».

Frías ha hecho un recorrido por los programas de ayuda a domicilio y los 99 centros de día con los que cuenta el Ayuntamiento de Madrid, señalando que de éstos, 57 son específicos para este tipo de demencias, y que el Área de Equidad, Derechos Sociales y Empleo, pone a disposición de los vecinos y vecinas de Madrid 3.000 plazas de atención con diferentes modalidades. También ha hablado sobre el programa de cuidadores “Cuidando a quienes cuidan”, así como el Respiro familiar para los fines de semana.