La delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, acompañada del concejal-presidente del distrito de Retiro, Santiago Saura, ha visitado esta mañana las obras de la nueva escuela infantil que el Ayuntamiento de Madrid está construyendo en la calle Cavanilles, 58.

El proyecto apuesta por la conservación de la nave de ladrillo existente correspondiente a los antiguos comedores de Metro, a la que se une un nuevo espacio. Ambos edificios, que suman una superficie construida de 1.000 m2, estarán conectados mediante dos galerías acristaladas.

En el nuevo espacio, de una sola altura, se ubicarán el acceso principal con cuarto para cochecitos, tres aulas, el despacho de dirección y los cuartos de basuras y eléctrico. La antigua nave, de la que se han conservado en su integridad todos los elementos protegidos, estará dividida en dos plantas. La baja incluirá un aula de bebés con cuarto de cunas, sala de usos múltiples, aseo público (adaptado y accesible) y todos los servicios de cocina.

En la primera planta habrá una sala de profesores, un aula-taller, las dependencias del pedagogo y una sala de reuniones para familias con dos espacios de espera, así como lavandería, vestuarios, almacén y cuarto de instalaciones. Los trabajos, que encaran su recta final, están siendo ejecutados por el Área de Obras y Equipamientos y han supuesto una inversión de 2,8 millones de euros.