Primeras multas de 600 euros por no llevar mascarilla puesta en el transporte público

Los diferentes cuerpos de policía de Madrid han comenzado este martes a multar a aquellos viajeros del transporte público que no lleven puesta la mascarilla, en el segundo día de obligatoriedad.

Las sanciones por no portar la mascarilla son similares a las de incumplir las restricciones de movilidad establecidas por el Estado de Alarma: entre los 600 y los 30.000 euros, aunque las que se están imponiendo son la mínima. Además, en algunos casos se añade esta multa a la expulsión del pasajero del vehículo de transporte público que esté usando.

Para evitar que haya pasajeros sin mascarilla, el Gobierno de España comenzó este lunes a repartir en la Comunidad de Madrid un total de 2.050.000 mascarillas, un reparto que se estenderá toda la semana.

Voluntarios de Protección Civil junto a agentes de Policía Nacional y Policía Local/Municipal están repartiendo en los principales nodos de transporte de la Comunidad de Madrid un total de 2 millones de mascarillas higiénicas a todos aquellos trabajadores que necesiten usar el transporte público.

Por su lado, las policías locales y Protección Civil de los diferentes municipios de la Comunidad, incluida la ciudad de Madrid, estarán acometiendo repartos en otras estaciones de Metro y Cercanías con menos afluencia y en la red de autobuses, tanto EMT de Madrid como interurbanos. Además, la Federación Madrileña de Municipios (FMM) está coordinando los puntos de distribución de mascarillas en aquellas localidades que carecen de red ferroviaria.

900.000 mascarillas en la ciudad de Madrid

El Ayuntamiento de Madrid está repartiendo esta semana 902.600 mascarillas entre la población que utilice el transporte público como medida de prevención de los viajeros frente a los contagios del coronavirus COVID-19.

Esta distribución se está realizando entre las 06:00 y las 09:00 horas y en la hora punta de la tarde, junto a los principales nodos de transporte. Está siendo a pie de calle en las siguientes estaciones de Metro y paradas de EMT:

Alsacia
Aluche
Glorieta de Atocha
Atocha Renfe
Benavente
Callao (Jacometrezo)
Canillejas
Cibeles
Ciudad Lineal
Colón
Conde de Casal
Cuatro Caminos
Diego de León
Embajadores
Felipe II
Glorieta San Vicente
Legazpi
Manuel Becerra
Mar de Cristal
Moncloa
Nuevos Ministerios
Pavones
Plaza de Castilla
Plaza de España
Puente Alcocer
Puente de Vallecas
Puerta de Alcalá
Puerta de Toledo
Sevilla – Sol (Cedaceros)
Sierra de Guadalupe
Villaverde Bajo Cruce

Además, se reparten mascarillas en los intercambiadores subterráneos de Moncloa, Príncipe Pío y Avenida de América.

De la gestión de su suministro se encargan las Áreas de Gobierno de Portavoz, Seguridad y Emergencias, de la que es responsable Inmaculada Sanz, y la de Medio Ambiente y Movilidad que dirige Borja Carabante.

La Policía Municipal y Protección Civil se sitúan en los intercambiadores de Príncipe Pío, Puerta del Sol y plaza Elíptica, además de en las estaciones de Méndez Álvaro, Chamartín, Villaverde Alto y Acacias. La Policía de Madrid también está presente en los 16 nodos de transporte más importantes para asegurar que el reparto se realiza sin incidentes.

Por su parte, operarios del Servicio de Atención Móvil de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) están distribuyendo mascarillas junto a otras 25 estaciones de la ciudad de Madrid.

Normativa en el transporte público

Este domingo se ha publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la Orden del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) que establece la obligatoriedad de uso de mascarillas que cubran nariz y boca a todos los usuarios de los servicios de transporte público y colectivo, tanto terrestre, como autobús, taxi, VTC y ferrocarril, como al transporte aéreo y marítimo.

La Orden determina asimismo que los trabajadores de los servicios de transporte que tengan contacto directo con los pasajeros también deberán ir provistos de mascarillas, así como tener acceso a soluciones hidroalcohólicas.

En los transportes públicos de viajeros realizados en vehículos de turismo, es decir, taxi y VTC, podrán desplazarse dos personas por cada fila de asientos, excepto en la del conductor, en la que sólo viajará él mismo.

En el caso de transporte en autobús y en ferrocarril se distinguen dos casuísticas distintas:

– En vehículos o vagones en los que todos los ocupantes deban ir sentados, la ocupación máxima se fija en el 50% de los asientos disponibles, manteniendo siempre vacía la fila posterior a la butaca del conductor en el supuesto de autobuses.

– En el caso de que también exista la posibilidad de transportar viajeros de pie, se establece como referencia de ocupación dos viajeros por metro cuadrado en estas zonas y el 50% de los asientos disponibles.