El Ayuntamiento de Madrid se ha adherido a la Declaración sobre Calidad del Aire impulsada en la Cumbre Mundial de Alcaldes de las 94 ciudades integradas en el C40, que se está celebrando en Copenhague. La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, ha participado esta mañana en la presentación del texto, que conlleva el compromiso de trabajar por un aire limpio y saludable que cumpla con los objetivos fijados por la Unión Europea y la Organización Mundial de la Salud.

En su intervención, Villacís ha explicado que el Gobierno del Consistorio madrileño «está trabajando en tomar acciones firmes para combatir el cambio climático». “Ese ha sido mi papel aquí en Copenhague, explicar cuáles van a ser las acciones del Ayuntamiento de Madrid para luchar contra la contaminación en las grandes ciudades”, ha señalado.

“Hemos explicado cómo se vive en Madrid y todos los esfuerzos que estamos haciendo, sobre todo a nivel  pedagógico, para concienciar a los madrileños de que tenemos que respirar un aire más limpio”, ha afirmado.

La vicealcaldesa ha destacado que “los ayuntamientos, al ser la administración más cercana al ciudadano, tenemos la responsabilidad de llegar a más acuerdos y tener una conciencia mucho más amplia de esta problemática”.

La declaración defiende que la contaminación del aire y la crisis climática van de la mano y demandan una acción rápida y colectiva para eliminar la contaminación que daña nuestra salud y calienta el planeta.

El texto subraya, además, que respirar aire limpio es un derecho humano y que como alcaldes de ciudades líderes a nivel global, deben actuar para proteger a los ciudadanos de las devastadoras consecuencias de la contaminación atmosférica.

El acuerdo, al que se ha adherido el Ayuntamiento de Madrid junto a otros 34 consistorios, conlleva los siguientes compromisos concretos:

  • En un plazo de dos años, establecer niveles de referencia y objetivos ambiciosos de reducción para los contaminantes atmosféricos que cumplan o superen los compromisos nacionales.
  • Antes de 2025, implementar nuevas políticas y programas sustantivos para abordar las principales causas de las emisiones de contaminación atmosférica dentro de la ciudad y bajo nuestro control.
  • Publicar anualmente los progresos en la reducción de los niveles de contaminación según los objetivos y el logro de los compromisos de esta declaración.

Para cumplir estos objetivos, los consistorios adheridos se comprometen a implementar nuevas políticas como incrementar el número de efectivos de transporte público de cero emisiones, lograr reducciones en los sectores de fuentes de contaminación atmosférica, crear zonas de bajas emisiones o de cero emisiones o garantizar un monitoreo fiable de la calidad del aire en toda la ciudad.