En la medianoche del pasado viernes 30 de noviembre arrancó la zona de bajas emisiones ‘Madrid Central’, incluida en el Plan de Calidad del Aire y Cambio Climático, con el objetivo de reducir la contaminación, el ruido y mejorar el reparto del espacio público.

Se trata de una zona de bajas emisiones de 472 hectáreas, prácticamente la totalidad del distrito de Centro, en la que esta restringido el tráfico de los vehículos, excepto residentes, transporte público, los vehículos de determinados colectivos necesarios para la vida del distrito y los menos contaminantes, según los distintivos ambientales de la DGT.

Hasta el pasado 9 de enero los agentes de la Policía Municipal de Madrid y de Movilidad situados en los 28 puntos de acceso a Madrid Central que habían estado asesorando desde noviembre a los conductores dejaron de hacerlo.

Aunque las multas no comenzarían a llegar hasta marzo, los policías han estado haciendo este trabajo de forma telemática: el Ayuntamiento de Madrid cruza las matrículas de los vehículos para comprobar si son residentes y por tanto tienen permiso para acceder a la zona de Madrid Central o, en caso de que no lo sean, si acceden a esta zona de bajas emisiones porque se dirigen a un aparcamiento público.

Esta labor la están desempeñando gracias a las 115 videocámaras instaladas en las calles que discurren en el perímetro de Madrid Central, 60 en calles de entrada y 55 en calles de salida. Cuando un conductor sin autorización acceda a la zona e incumpla la normativa, recibe una carta informativa sobre cómo debe actuar correctamente.

Según ha informado el Área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, el Consistorio gobernado por Manuela Carmena ha enviado más de 14.000 avisos informativos a conductores que han accedido a Madrid Central sin tener permiso para ello.

A partir de este sábado, 16 de marzo, llegarán las multas. Estas serán sanciones económicas de un total de 90 euros, que podrán reducirse a 45 euros si el pago se lleva a cabo en el plazo de 20 días naturales. No conllevarán en ningún caso la pérdida de puntos del carnet de conducir.

Delimitación de Madrid Central

Madrid Central está delimitada por la circunvalación de rondas, bulevares y el eje Prado-Recoletos. En concreto, el perímetro lo forman las calles Alberto Aguilera, glorieta de Ruiz Jiménez, Carranza, Sagasta, glorieta de Bilbao, Génova, plaza de Colón, Paseo de Recoletos, plaza de Cibeles, Paseo del Prado, plaza de Cánovas del Castillo, glorieta de Carlos V, Ronda de Atocha, Ronda de Valencia, glorieta de Embajadores, Ronda de Toledo, glorieta de la Puerta de Toledo, Ronda de Segovia, Cuesta de la Vega, Mayor, Bailén, plaza de España, Princesa y Serrano Jover.

Estan restringidos los accesos a la circulación en las calles situadas dentro de dicho perímetro a excepción de las calles Santa Cruz de Marcenado, Mártires de Alcalá, Gran Vía de San Francisco, Bailén, Algeciras, Cuesta Ramón, Ventura Rodríguez y Duque de Liria, por motivos de ordenación del tráfico al no existir alternativa a estas vías.

Menos tráfico y más fluido

Según ha informado el Ayuntamiento de Madrid, se ha constatado una importante reducción del tráfico en el interior de Madrid Central y más leve en el perímetro, por lo que no se habría producido efecto frontera negativo. El tráfico ha aumentado ligeramente en la M-30, siendo esta la vía alternativa para el tráfico de paso eliminado de Madrid Central que ha optado por otros itinerarios.

En los días laborables, en Gran Vía, se ha registrado una reducción de la intensidad de tráfico próxima al 30%, del 13% en San Bernardo y del 8% en la calle Toledo. En los viales que conforman el perímetro de Madrid Central, se observa también una disminución del tráfico y una mayor fluidez, pero más mitigada con una media de descenso de intensidad entorno al 1,43%. Por otro lado, en M-30 se ha obtenido un incremento de intensidad del 0,9% aunque la fluidez de la vía no se ha visto afectada.

Respecto a los fines de semana, se ha detectado un descenso menos acusado de intensidad en la Gran Vía, con una media del 7%, que se debe a que se han realizado menos cortes puntuales por parte de policía municipal y agentes de movilidad por ser el tráfico más fluido.

Además, en la calle San Bernardo la disminución media de intensidad en el primer fin de semana y en el puente de la Constitución ha sido del 11,67% y en la calle Toledo del 13,25%. En los viales perimetrales como media ha presentado un descenso de intensidad del 8,95% y en la M-30 ha aumentado un 1,79% sin verse afectada la fluidez.

Datos del SER

Madrid Central también ha supuesto un descenso de vehículos altamente contaminantes. Existe un gran descenso de tiques del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) en el interior de Madrid Central para los vehículos sin distintivo (casi el 70%), de categoría B (casi el 61%) y C (46,6%) que contrasta con descensos más moderados en los barrios colindantes: un descenso del 35,5% de vehículos sin distintivo, un 20,6% (distintivo B) y un aumento del 6,9% (distintivo C).

Por su parte, los tiques de vehículos ECO aumentan en un porcentaje muy importante en ambos casos, en torno a un 85%, al no haber restricciones para estos vehículos.

Aparcamientos municipales

La recaudación de los aparcamientos municipales del ámbito de influencia de Madrid Central se ha reducido un 6,9%. En el interior de Madrid Central el descenso ha sido del 14,3%, si bien hay que tener en cuenta la tendencia de reducción durante todo el año y que el aparcamiento de Sevilla se encuentra fuera de servicio por las obras de Canalejas. Por su parte, en los aparcamientos exteriores limítrofes a Madrid Central la recaudación ha subido un 7,6 %.

Información a la ciudadanía

Además de la campaña de información y sensibilización que comenzó el 1 de noviembre en soportes exteriores y medios de comunicación, desde la aprobación del acuerdo de Madrid Central, el 29 de octubre, las Oficinas de Atención a la Ciudadanía y el 010 han atendido 37.309 solicitudes de servicio de información.

Por su parte, los 60 informadores en calle de Línea Madrid han gestionado más de 17.000 consultas. Además, la web www.madrid.es/madridcentral ha tenido más de 841.220 visualizaciones de los contenidos y las preguntas frecuentes.

Además, desde comienzos de año un autobús de la EMT está recorriendo diferentes zonas de la capital para informar a la ciudadanía que vive fuera de la almendra central, sobre las medidas adoptadas en torno a esta zona Madrid. En el mismo, cuatro agentes del Servicio Municipal de Atención a la Ciudadanía, Línea Madrid, son los encargados de informar, así como de resolver dudas y entregar los dípticos informativos.

Otro dato significativo es que las personas residentes han gestionado 7.771 autorizaciones puntuales para invitados y se han tramitado 1.142 permisos de acceso para titulares de tarjetas para personas con movilidad reducida.

La Mesa de Seguimiento

El pasado mes de enero representantes de residentes en el área, organizaciones sociales, empresariales y sindicatos, expertos en salud y calidad del aire, universidades y técnicos municipales compusieron la mesa de seguimiento de Madrid Central.

Su función es “examinar la información proporcionada por una serie de indicadores así como cualquier dato relevante para el mejor funcionamiento de Madrid Central y proponer en su caso las medidas de apoyo e incentivo complementarias necesarias para alcanzar los objetivos de la nueva zona de bajas emisiones”.

El seguimiento se hará a través de una serie de indicadores relativos al tráfico, el funcionamiento y uso del transporte público, de BiciMad, del taxi o las opciones de movilidad compartida, así como la movilidad peatonal, así como la evolución de los accesos indebidos y de sanciones en su momento.

También habrá indicadores de impacto en tres materias: la calidad del aire en la zona y también en el conjunto de la ciudad, la del ruido y la transformación de flotas que acceden a Madrid Central.

Todo esto es resultado del Acuerdo de 29 de octubre de 2018, de la Junta de Gobierno de la ciudad de Madrid, de Madrid Central, que determina la evaluación continúa del funcionamiento de Madrid Central, y en particular, del ritmo de renovación de las flotas de vehículos de empresas y profesionales de servicios y suministros.