La última encuesta trimestral de coste laboral del INE pone en evidencia, según CCOO, «los objetivos que perseguía la reforma laboral impuesta por el Gobierno del PP y de los recortes salariales y de derechos que la han acompañado: beneficiar a las empresas mediante la reducción de los costes laborales y especialmente las rentas salariales de trabajadoras y trabajadores».
CCOO ha denunciado hoy que cada mes los trabajadores madrileños hacen en torno a 1,7 millones de horas extras, según los datos del primer trimestre de 2018 de la Encuesta Trimestral de Coste Laboral realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Esto supone que, con horas extras, se cubre la carga de trabajo equivalente a 10.000 puestos de trabajo a jornada completa.
En su valoración de la encuesta difundida por el organismo público, CCOO destaca también que «los datos publicados ponen en evidencia los objetivos que perseguía la reforma laboral impuesta por el Ejecutivo del PP y de los recortes salariales y de derechos que la han acompañado: beneficiar a las empresas mediante la reducción de los costes laborales y especialmente las rentas salariales de trabajadoras y trabajadores».
En Madrid, la media de horas extra realizada por un trabajador asalariado a tiempo completo es de 0,6 horas mensuales. Es decir, que los 2,2 millones de personas que trabajan por cuenta ajena a jornada completa en esta región asumen una carga extra de trabajo de más de 1,3 millones de horas al mes.
Por su parte, quienes trabajan a tiempo parcial, realizan de media 0,9 horas extra, lo que supone por trabajador un 50% más (respecto al tiempo completo), a pesar de que su jornada es más corta. Es decir, el peso de las horas extraordinarias sobre la jornada total de estos trabajadoras (y sobre todo trabajadoras, ya que el 75 por 100 son mujeres) es más alto que en el caso del tiempo completo, lo que indica también «como estas jornadas en muchas ocasiones se utilizan de manera abusiva y para permitir una mayor flexibilidad a la empresa».
Según la encuesta, el coste laboral trabajador/mes en la Comunidad de Madrid ha aumentado un 0,5%, un dato que se sitúa por debajo de la media del Estado que ha subido hasta el 0,7%, con respecto al mismo período del año 2017. Esta cifra incluye el coste salarial y el de las cotizaciones obligatorias.
CCOO constata «cómo la economía española ha recuperado los niveles de la crisis después de una década. Y son las empresas las que mejor han salido de ella. Comparando los datos de 2007 con los actuales, las sociedades no financieras han alcanzado unas rentas de 267.680 millones de €, 98.474 millones más que en 2008, un año después del inicio de la crisis económica. En cambio, las rentas de los hogares que se evalúan en 686.071 millones, todavía pierden 28.058 millones respecto a 2008».
Otro de los elementos destacados en la encuesta es la razón por la que las empresas no ofrecen puestos vacantes. La encuesta indica que la principal razón tiene que ver con la actividad económica, ya que el 94,5% de las empresas que no ofrecen puestos de trabajo alegan como causa no necesitar trabajadores.
Solo el 2,8% alega como causa los costes derivados de la contratación, y es el porcentaje más bajo desde al menos 2013. Los costes laborales apenas tienen peso entre las causas alegadas por los propios empresarios para no realizar contratos, «lo que refuerza la reivindicación que hacemos desde CCOO de promover medidas que impliquen el desarrollo de la actividad, la apuesta por nuevos y diversos sectores productivos y sobre todo el empleo de calidad como elemento que garantizará que la recuperación sea sólida y duradera en el tiempo, y no un lastre».
Respecto a las vacantes no cubiertas por las empresas, en el primer trimestre de 2018 han supuesto 22.166, un incremento del 21,3% respecto a 2017 y 44,4% respecto a 2016. Aunque el principal problema de la Comunidad de Madrid son las 456.000 personas desempleadas según la EPA (las vacantes solo equivalen al 5 por 100 de la población desempleada), «no deja de ser un incremento relevante de las vacantes no cubiertas, vinculado al repunte de la actividad laboral (las empresas ofertan más empleos) pero que refleja igualmente la necesidad de mejorar las condiciones laborales, salariales y de jornada de los puestos de trabajo que se ofertan».
Los análisis del Banco de España son claros: «ante una situación de crisis financiera las empresas aumentan sus márgenes para poder autofinanciarse, y lo hicieron ajustando costes. En primer lugar con un rápido y brutal recorte del empleo. Gracias a este recorte el dinero que emplearon las empresas en pagar a sus personas asalariadas se redujo en 65.000 millones. Este radical ajuste les proporcionó, en los primeros años de la crisis, un aumento de unos 30.000 millones de € en sus rentas, cantidad que progresivamente y con la eficaz ayuda del Gobierno del PP con su reforma laboral se elevó hasta los 267.680 millones. Al mismo tiempo las empresas redujeron su endeudamiento hasta alcanzar una liquidez de unos 34.000 millones de € en 2017 y han destinado a dividendos 15.663 mil millones de €, un 33% más que antes de empezar la crisis en 2007».
Sin embargo, en esta fase de recuperación, los salarios ha crecido a un ritmo mucho menor y todavía se encuentran un 6% por debajo de la media salarial de 2007, sin tener en cuenta la devaluación producida por las subidas del IPC y el aumento general del coste de los servicios esenciales (luz, agua, gas, vivienda, impuestos, etc.). «El pequeño incremento de costes salariales del primer trimestre de este año refleja la lenta recuperación de las rentas salariales en la salida de la crisis».
Por tanto, advierten desde CCOO, «es urgente derogar los contenidos más negativos de la reforma laboral y recuperar la negociación colectiva de las personas asalariadas para lograr un reparto solidario y equitativo de las rentas que garanticen unos mínimos vitales a las capas más desfavorecidas de la sociedad madrileña».