En términos de población, Madrid es la ciudad más grande del estado español donde los habitantes mayores de 55 años se sitúan en 1.039.955 y la esperanza de vida es más elevada a la del resto de comunidades autónomas.

Ante esto surge la necesidad de crear una herramienta para medir la participación de las personas mayores en diferentes ámbitos de la sociedad y poder compararlos con los resultados obtenidos en otros países de la Unión Europea, incluso con el realizado en todo el territorio nacional.

Así se crea este instrumento que tiene su origen en 2012, coincidiendo con la celebración del Año Europeo del Envejecimiento Activo y la Solidaridad Intergeneracional.

El principal objetivo es concienciar a la sociedad de que las personas mayores tienen un valor como colectivo y no únicamente de forma individual. Para poder llevarlo a cabo se han consultado diversas fuentes, municipales y de organismos oficiales, siendo de gran ayuda el Padrón municipal de habitantes y la Encuesta de Salud de la Ciudad de Madrid de 2017. Además, ha sido necesario realizar una encuesta específica a 3.011 personas con 55 años o más.

Tras la recogida de datos se han estudiado cuatro parámetros: el empleo, la participación social, la vida independiente, saludable y segura, además de la capacidad y los entornos apropiados para un envejecimiento activo y saludable. Madrid se sitúa en los 37 puntos de los 100 posibles, superando los 32,49 de España y los 34,80 de media de los 28 países de la Unión Europea.

Las mujeres puntúan por debajo de los hombres debido, principalmente, a la desigualdad en el empleo pero también contribuyen otros factores como el uso de las tecnologías, la práctica de ejercicio o el sentimiento de inseguridad. Sin embargo, participan más en los cuidados, tienen más inquietud por el aprendizaje y por relacionarse con el resto de la sociedad.

En definitiva, el Índice de Envejecimiento Activo, además de reconocer el valor de las personas mayores como conjunto de la sociedad, va a permitir realizar la evaluación del Plan de Acción 2017-2019 dirigido a optimizar las oportunidades de salud, participación o seguridad y es una oportunidad para seguir trabajando para mejorar las políticas dirigidas a las personas mayores y a todos los ciudadanos independientemente de su edad, género, necesidades o capacidades.