El río Manzanares tiene desde este miércoles, 10 de octubre, nuevos habitantes. Se trata de siete ejemplares de galápago leproso que el Grupo de Rehabilitación de la Fauna Autóctona de la Fauna y su Hábitat (GREFA) ha soltado en el río madrileño. Actualmente el Manzanares reúne las condiciones adecuadas para albergar a estos reptiles acuáticos autóctonos tras la renaturalización que ha llevado a cabo el Ayuntamiento de Madrid.

Estos ejemplares, cuatro hembras y tres machos, se suman a los 15 que se soltaron el pasado mes de mayo con el fin de potenciar la biodiversidad y concienciar a la población de la necesidad de conservar la fauna autóctona. Todos ellos han sido rehabilitados en el hospital de fauna salvaje de GREFA. Los animales tienen unas marcas que interfieren en su ciclo vital pero facilitan su identificación y seguimiento.

El galápago leproso es una especie protegida, autóctona española, que vive entre 20 y 25 años. El río Manzanares forma parte de su hábitat, sin embargo, durante muchos años, no han podido vivir en sus aguas al estar embalsada. Tras la regeneración que se ha producido en el río con el proyecto de renaturalización, el Ayuntamiento de Madrid ha querido volver a introducir estos animales para recuperar la fauna autóctona.